La mezcla mexicana trepó 5 centavos para cerrar en 33.42 dólares el barril

Nuevo récord de petroprecios ante el agravamiento de la situación en Irak

Se reactivaron temores sobre posibles conflictos que hagan peligrar el abasto petrolero

AFP, REUTERS Y DPA

Nueva York, 17 de mayo. El precio del petróleo cerró en un nuevo récord este lunes en Nueva York, tras el asesinato en Irak del presidente del consejo de gobierno provisional iraquí, Ezedin Salim, lo que reactivó los temores sobre una perturbación en el abasto del crudo.

El barril del crudo liviano para entrega en junio terminó a 41.55 dólares, un aumento de sólo 17 centavos respecto al viernes. Durante la mayor parte de la sesión de este lunes el precio bajó hasta 40.95 dólares, pero volvió a subir en la última hora de transacciones.

Incluso, la cotización alcanzó un inédito 41.85 dólares, su nivel más alto desde que el mercado petrolero lanzó la modalidad de contratos de crudo en 1983.

En Londres, el barril de Brent del Mar del Norte para entrega en junio subió 5 centavos a 37.91 dólares, mientras la mezcla mexicana de exportación trepó apenas 5 centavos para ubicarse a 33.42 dólares.

Desde fines del año pasado los precios han aumentado 28 por ciento, casi 9 dólares el barril.

El asesinato de Salim, a 43 días de la entrega de la soberanía a los iraquíes por Estados Unidos, y una nueva explosión en un oleoducto cerca de Kirkuk, al norte de Irak, ''no hacen más que ilustrar el mantenimiento de las amenazas de sabotaje y de terrorismo'', indicaron los analistas.

Además, persiste la preocupación de que el rápido crecimiento de la demanda exceda las posibilidades de abasto global.

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que controla la mitad de las exportaciones mundiales del energético, se reunirá informalmente a fines de esta semana en una conferencia en Amsterdam, para discutir una propuesta de Arabia Saudita de elevar los limites de producción en al menos 1.5 millones de barriles diarios, a fin de aliviar los precios.

El presidente del cártel, el indonesio Purnomo Yusgiantoro, dijo que la organización estaba disgustada con los actuales altos precios del petróleo.

En marzo, la OPEP acordó reducir el máximo de producción de crudo en un millón de barriles diarios; sin embargo, de acuerdo con versiones periodísticas, la mayoría de los países miembros del cártel ha mantenido la producción al límite de su capacidad.

Estados Unidos ha encabezado la voz de los países consumidores para pedir a la OPEP que envíe más suministros al mercado, al crecer los temores de inflación y desaceleración del crecimiento económico.

Otro factor que impulsa los precios al alza es el dato sobre los bajos inventarios de gasolina en Estados Unidos, antes de que comience la temporada de vacaciones de verano.

Los analistas indicaron que ''la estrechez de los aprovisionamientos de gasolina no muestra señal de mejoría'', a dos semanas del comienzo de la temporada estival boreal, pico anual del consumo estadunidense.

Por otro lado, las compañías aéreas reaccionaron ante el aumento de los precios del crudo, subieron el precio de sus boletos y adquirieron combustible con antelación.

Para hacer frente al aumento del precio del queroseno, que representa 10 por ciento de su volumen de negocios, muchas compañías han subido los valores de sus boletos, como British Airways, que elevó en 5 libras (casi 9 dólares) el precio de sus vuelos internos y en 8 dólares el de sus trayectos internacionales. La francesa Air France anunció que aumentará sus tarifas en seis euros por vuelo de ida y vuelta a partir de este miércoles.

La estrategia de subir precios, puesta en marcha por varias compañías antes de la ofensiva militar en Irak en marzo de 2003, se reanudó con fuerza en los últimos meses por parte de compañías como American Airlines, cuyos responsables argumentaron que cada vez que el precio del barril de queroseno ''sube un centavo se traduce en gastos suplementarios de 30 millones de dólares por año''.

American Airlines fue imitada por la española Spanair y la australiana Qantas.

Mientras tanto, otras compañías evitarán un aumento de sus precios gracias a importantes reservas de carburante, como Lufthansa, que tiene en sus depósitos 80 por ciento del queroseno que necesitará en 2004. La tercera compañía aérea española, Air Europa, decidió subir sus tarifas entre 3 y 5 por ciento.