México D.F. Lunes 27 de octubre de 2003
Constatará la condición legal
de 1.1 millones de empleados en Estados Unidos
Wal-Mart despedirá a trabajadores indocumentados
tras una revisión
La firma enfrenta descontento de sindicatos y negativa
de alcaldías para abrir más tiendas
AFP
San Francisco, 26 de octubre. Con cientos de trabajadores
ilegales detenidos, decenas de tiendas cerradas por huelgas y alcaldías
que se oponen a la apertura de nuevas sucursales, el grupo número
uno de ventas minoristas del mundo, Wal-Mart, obtiene un volumen de ventas
global de 245 mil millones de dólares, y cinco de sus principales
accionistas, miembros de la familia Walton, figuran en la lista de los
10 estadunidenses más ricos de la revista Forbes.
Más
de 300 inmigrantes ilegales que trabajaban para Wal-Mart fueron detenidos
el jueves en 61 tiendas. La cadena argumentó que los ilegales, empleados
en sectores de limpieza, estaban ligados a la firma mediante empresas subcontratadas.
Pero las autoridades afirmaron que la cadena de tiendas tenía conocimiento
de la condición ilegal de los inmigrantes.
Wal-Mart ya fue objeto de redadas similares en 1998 y
2001. De hecho la firma, considerada la primera empleadora privada de Estados
Unidos, con 1.2 millones de asalariados que trabajan en más de 3
mil tiendas, fue acusada de pagar sueldos mínimos al punto de empobrecer
a su propios asalariados y asfixiar a los pequeños comerciantes.
Esta acusación llevó el miércoles
a la alcaldía de Oakland, en los suburbios de San Francisco (al
sudoeste de California), a prohibir la instalación de una nueva
sucursal Wal-Mart, al igual que anteriormente lo hizo el vecino condado
de Contra Costa.
El diario The New York Times informó que
los inmigrantes detenidos el jueves trabajaban prácticamente sin
descanso, percibían escaso salario y laboraban en la madrugada.
Víctor Zavala afirmó que el contratista con el que trabajaban
él y su esposa pagaba 400 dólares por semana, laborando 56
horas.
Este domingo la cadena anunció que revisará
el estado legal de sus 1.1 millones de empleados en Estados Unidos y que
despedirá a todo inmigrante indocumentado.
En tanto, un sindicato que reúne a cerca de 83
mil empleados de supermercados, inició una huelga hace dos semanas
de carácter nacional, desde California hasta Ohio, pasando por Missouri,
Kentucky y Virginia Occidental, para protestar contra la rebaja de sus
salarios y prestaciones sociales.
Los empleadores se justificaron argumentando que la competencia
obliga a Wal-Mart a reducir los costos al máximo, lo cual orilla
al grupo a pagar sólo la mitad del salario negociado con los sindicatos.
Conocido por bajar al máximo los costos y los precios,
Wal-Mart obtiene actualmente un volumen de ventas global de 245 mil millones
de dólares.
Miles de sus "grandes cajas" -gigantescos cubos de cemento
que alcanzan algunas veces 9 mil metros cuadrados- están distribuidas
por todo Estados Unidos y nueve países. Estos supermercados ofrecen
de todo, desde productos alimentarios hasta equipos automotores, ropa,
electrodomésticos e inclusive materiales y elementos de decoración
y construcción.
Cinco de sus principales accionistas, miembros de la familia
fundadora Walton, figuran en la lista de los 10 estadunidenses más
ricos, de la revista Forbes, con capital estimado en 102 mil 500
millones de dólares.
Varios sindicatos consideran que esa riqueza está
construida sobre la pobreza de los asalariados de sus empresas, y afirman
que muchos de esos trabajadores viven bajo el nivel de pobreza.
Para el municipio de Oakland, otra tienda Wal-Mart contribuiría
a la caída de los salarios de todo el sector de abarrotes: "Nuestros
supermercados pagan un salario de 18 dólares por hora, contra sólo
siete u ocho dólares que paga Wal-Mart".
Sin embargo, un portavoz del grupo, Tom Williams, aseguró
que los sueldos de la empresa "son muy comparables" con los de la competencia,
y agregó que "cuando las colectividades rechazan una tienda, privan
a los consumidores de la competencia".
|