El grupo tapatío Maná se presentó anoche en el Palacio de los Deportes, con lleno total

Fher: Marcos me desilusionó, pero no me arrepiento de citarlo en el disco

El vocalista lamenta la falta de acciones del gobierno en contra de la piratería Asegura que en cinco o 10 años pondrán verde al país, plantando 170 millones de árboles anuales

JUAN JOSE OLIVARES

Horas antes de iniciar su concierto en el Palacio de los Deportes, los integrantes del grupo tapatío Maná, considerado por muchos como la banda de rock nacional más importante en el mundo, se reunieron con la prensa y declararon que no se arrepienten de incluir palabras del subcomandante Marcos en su reciente grabación llamada Revolución de amor, pese a su desilusión porque éste "haya apoyado al grupo vasco ETA". Aprovecharon también para criticar al gobieno por las pocas acciones en contra de la piratería y celebraron a las personas que les sobran "güevos" para apoyar la causa ecológica de manera independiente.

"Le perdí la pista a los zapatistas desde la estupidez que hicieron de apoyar a ETA. Espero que saquen la voz como lo hacían y se reivindiquen. Es un movimiento muy auténtico, que ha reivindicado a todas las etnias de México, a los indígenas. Todos cometemos pendejadas, yo las he dicho ante los medios. Todo mundo tiene eso porque somos humanos. Y no me arrepiento de haber incluido palabras de Marcos en el disco, porque son las palabras de todos los indígenas de México, aunque me desilusionó que un movimiento tan pacífico, la guerrilla más blanca en la historia del planeta, haya dado su apoyo a ETA y no al brazo político, eso fue una estupidez", comentó el cantante Fher.

Maná ha ganado cinco premios Grammy, tiene ocho álbumes lanzados internacionalmente, 26 países visitados en gira, nueve premios Billboard, 98 discos de oro y 73 de platino, líder de ventas por más de 15 años, y han compartido escenario con efigies del rock como Santana, Bono y Eric Clapton, pero no están libres de la piratería. Su disco, como comentó un comunicador, "es el más vendido del Metro".

"Qué poca madre", afirmó Fher. "Creo que hay un problema histórico y todos lo sabemos: los discos están muy caros y las tiendas estaban abusando con los precios, por lo que empezó a generarse esto. Pero lo que me da tristeza es que las compañías de discos están tronadas y ya no tienen la capacidad de lanzar a nuevos artistas, nuevas propuestas locales, porque el presupuesto es para los extranjeros. Con la piratería se perderá la proposición. Es injusto, porque no pagan impuestos. El gobierno debería presionar más; a veces quieren proteger este tipo de cosas y ser tolerantes para tener más votos, pero deben saber que eso es ilícito; está jodido el país. Creo que el gobierno tiene que dejar de hacerse pato y poner las manos donde debe ser; todo mundo sabemos que hay autoridades involucradas en esto, así ha estado funcionando México y ya estuvo, no podemos tolerar eso. Mucho ojo cuando elijamos a nuestros gobernantes".

El encuentro con Bono

Revolución de amor, editado por Warner, está postulado a un Grammy Latino como mejor álbum vocal de rock y llevó a la banda a una extensa gira por Europa, que incluyó su presentación en mayo en el concierto del tenor italiano Luciano Pavarotti, llamado Pavarotti y amigos. En este concierto se dio un acercamiento con Bono (con quien platicaron sobre el polémico episodio cuando en la gira de U2 en México, los guaruras del hijo del entonces presidente Ernesto Zedillo golpearon a un técnico de la banda), con quien posiblemente graben algo. "El fue quien nos sugirió hacer algo juntos... pero no es algo confirmado", dijo el baterista Alex González, acompañado por el guitarrista Sergio Vallín y el bajista Juan Calleros.

De su experiencia en Europa comentaron: ''En Italia y Alemania tocamos en lugares chicos, empezamos en lugares de 500 o mil personas, pero Maná creció en bares, en antritos, recordamos nuestras primeras experiencias, nuestra primera escuela, que lo hicimos durante muchos años. Lo hacemos con mucho gusto y pasión, pero esto ha ido creciendo. En Alemania ya había casi 4 mil, en Roma 10 mil, la banda sigue picando piedra", recordó Fher.

Pero "si hay un lugar donde extrañamos tocar es México, que nos ha dado la oportunidad de expulsarnos a muchas partes del mundo donde hemos llevado en alto su nombre y el de Latinoamérica".

Poner verde al país

Los ecologistas de Maná no paran en su altruismo, y comentaron sobre un proyecto a escala nacional: ''un gremio estatal convoca a chavos y chavas a plantar árboles, más de 170 millones. Si esta campaña tiene éxito, en un año serán otros 170 millones y en cinco o 10 años pondremos verde a todo el país. Lo más fácil es cruzar los brazos y quejarse, por eso admiramos a la gente que le sobran güevos para hacer las cosas, independientemente si es ecología o derechos humanos. De verdad hay gente en este país que se preocupa, aunque no es la mayoría. Es más fuerte el mensaje que puede tener un músico o una banda, que el de un político. Siempre hemos tratado de usar nuestra fama para inspirar a hacer cosas positivas; no sabes si en algún concierto estará el próximo presidente de algún país o los futuros líderes políticos".

Por lo pronto, sigue la gira de Maná el próximo 7 de agosto en el mismo Palacio de los Deportes; el 8, en San Luis Potosí; el 9, en Monterrey; el 14, en Veracruz; el 16, en Villahermosa, y el 23 en Ciudad Juárez