Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Martes 18 de febrero de 2003
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Política

"Ideólogos del individualismo", quienes insisten en que desaparezca la SRA

CNC: desintegrar núcleos ejidales, objetivo final de la política agraria

ANGELICA ENCISO L.

La Confederación Nacional Campesina (CNC) afirma que las actuales políticas agrarias han buscado la desintegración de los núcleos ejidales y "ante la resistencia de los ejidatarios, comuneros y colonos de mantener la componente colectiva de su tenencia original", los ideólogos del individualismo contratacan con la insistencia de desaparecer la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA).

En el documento base de la mesa de ordenamiento de la propiedad rural, que se realizará hoy dentro del acuerdo por una nueva política de Estado para el campo, la organización indica que en este tema las agrupaciones campesinas han mantenido diferencias sustanciales con el Ejecutivo, ya que éste limita el ámbito de la SRA al ordenamiento de la propiedad con el levantamiento del catastro, la certificación de la propiedad y el avance del dominio pleno.

Recuerda que desde que comenzó esta administración "muchas voces" se han manifesado por la desaparición de la SRA, y subraya: "no les bastaron las modificaciones a la legislación en 1992".

La dependencia, además de conservar sus tareas actuales, debe "refuncionalizarse" para absorber todas las tareas relacionadas con la capacitación, la organización económica y financiera de los hombres y mujeres campesinos; fortalecer su relación con los núcleos agrarios; defender y respetar la propiedad social y los diferentes tipos de tenencia; proteger el patrimonio rural de los sujetos de derecho y sus sucesores; promover y constituir un sistema de asistencia y seguridad social, y crear un programa de tierras para el desarrollo urbano.

El gobierno federal, agrega, "habla de una política capaz de rencontrar la dignidad del trabajo del servidor público, mejorar la autoestima del sujeto agrario y afirmar sus valores", pero esto no se refleja en el diseño de los programas, los cuales conservan no sólo la estructura, sino el mismo nombre. También ha buscado la desarticulación y descalificación de las centrales campesinas, acusándolas de corporativistas, y es claro que busca desaparecerlas para crear organizaciones de la sociedad civil, señala.

El documento es un diagnóstico del trabajo gubernamental en este rubro: "los programa sectoriales ignoran a ejidos y comunidades, y ponderan a la familia como la unidad fundamental en el desarrollo personal y social, sin admitir que el núcleo agrario sigue siendo la célula social y económica".

Destaca que actualmente hay unos 30 mil casos no resueltos de límites de tierras, de los cuales 6 mil son focos rojos, y que "el desarrollo de las áreas de uso común está allí, esperando los apoyos gubernamentales".

El análisis no sólo queda en críticas, sino que presenta cifras. El Programa de Certificación de Derechos Ejidales y Titulación de Solares (Procede) al principio de la administración tenía la meta de 7 mil 855 núcleos; hasta ahora sólo ha titulado mil 750, y para cumplir con el objetivo al año se deberían regularizar mil 526, pero se trata de los que tienen mayor dificultad.

En relación con las expropiaciones señala que "el gobierno federal, antes de preocuparse por cubrir las indemnizaciones pendientes, está más interesado en consolidar este procedimiento para agenciarse de tierras". La CNC se pregunta por qué las autoridades no buscan asociarse con los campesinos y pagarles el precio real de sus tierras.

"Las modificaciones al artículo 27 constitucional y la promulgación de la legislación agraria colocaron en el mercado la propiedad social. La tierra es un bien como cualquier otro, sujeto a la ley de oferta y la demanda", sostiene.

La SRA debe establecer compromisos de organización económica y empresarial de los sujetos de derecho, las mujeres y los jóvenes campesinos; proteger el tejido social integrado por ejidos y comunidades; defender la propiedad social ante los embates de los especuladores y del propio gobierno y acotar las sociedades mercantiles propietarias de tierras

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