Emplazan al Poder Legislativo a defender
el monto autorizado en el presupuesto
Rechazan líderes de sindicatos universitarios
política de recortes al presupuesto educativo
Demandan que el financiamiento a este sector sea ajeno
a conflictos políticos
El Congreso "se queda callado" ante las imposiciones
del Ejecutivo, señalan
JOSE GALAN
Líderes de sindicatos universitarios se manifestaron
en contra de que el Poder Ejecutivo recorte el presupuesto de educación
aprobado por la Cámara de Diputados, cada vez que la Secretaría
de Hacienda y Crédito Público (SHCP) enfrente problemas de
liquidez por la caída en la recaudación tributaria; exigieron
que el financiamiento a la educación adquiera rango de política
de Estado para que no esté sujeto a los vaivenes políticos,
y exhortaron al Congreso de la Unión a evitar la "explosión"
de conflictos sociales, eliminando los topes salariales para el año
fiscal 2003.
El
rechazo a los recortes del presupuesto educativo aprobado por los legisladores
-una postura hecha pública incluso por rectores como Juan Ramón
de la Fuente, de la UNAM- formará parte del plan de acción
que los sindicatos universitarios diseñaron para aplicarlo en el
próximo otoño, cuando buscarán presionar al Congreso
de la Unión para que se incremente el financiamiento a la educación
superior pública del país.
Asimismo, pugnarán por la creación de un
fondo de garantía para las pensiones y jubilaciones de los universitarios,
y por el establecimiento de incrementos salariales para desactivar movimientos
de huelga a principios del año entrante, cuando la mayoría
de los sindicatos emplazan a la revisión salarial y contractual.
José de Jesús Becerra, líder de los
trabajadores administrativos de la Universidad de Guadalajara, afirmó
que es el Congreso de la Unión quien fija el presupuesto para la
educación y que el Poder Ejecutivo "no tiene facultades para revertir
una decisión soberana del Poder Legislativo, y para afectar, en
los hechos, lo que en el discurso (se) ha llamado el pilar del desarrollo,
es decir, el proceso educativo".
Por su parte, David Villarruel, secretario de Relaciones
del sindicato de la Universidad Autónoma Metropolitana, sostuvo
que los sindicatos universitarios están "en contra de ese tipo de
decisiones, que afectan a todo el sector educativo, pero sobre todo al
nivel medio superior y nivel superior, incluyendo el desarrollo de la investigación,
de la ciencia y de la tecnología".
"Lo curioso del caso es que cuando el Ejecutivo impone
esos recortes, el Legislativo se queda callado, aún cuando afecta
sus propias decisiones", indicó.
Carlos Galindo, secretario de Relaciones del sindicato
de la UNAM, afirmó que es intención de los representantes
de los trabajadores del sector educativo defender a la universidad pública
"en todas sus formas, incluyendo la burla que significa la aprobación
de un presupuesto para educación, que después pasa por recortes
para quedar muy por debajo de lo que aprobaron los diputados. Eso es, en
términos prácticos, un engaño al país".
Arturo Burnes Ortiz, líder de los trabajadores
académicos de la Autónoma de Zacatecas, se manifestó
en contra de la "visión reduccionista de que hacen gala en el Poder
Ejecutivo, sobre todo en contra de las decisiones del Poder Legislativo,
y que afecta a la educación en general en un país donde,
hoy más que nunca, se requieren ya de políticas de Estado
para neutralizar las actitudes caprichosas de la Secretaría de Hacienda".
Agustín Sánchez, secretario de Relaciones
del sindicato de académicos de la Universidad Autónoma de
Sinaloa, consideró que para evitar esos recortes, los sindicatos
deben poner en juego parte de su estrategia, pero advirtió que "también
los legisladores deben evitar que el Ejecutivo le meta tijera a sus decisiones,
con una actitud más enérgica".