Fue detenido un niño de 13 años
como responsable de "actos de terrorismo"
Queman guanajuatenses dos patrullas en protesta por
la muerte de un joven a manos de la policía
Un uniformado de Juventino Rosas disparó el jueves
al adolescente, que defendía a su padre
MARTIN DIEGO CORRESPONSAL
Santa Cruz de Juventino Rosas, Gto., 6 de julio. Dos
vehículos de la policía municipal de Cortázar -que
junto con las de Salvatierra, Celaya y Juventino Rosas resguardan el palacio
municipal de esta localidad desde el jueves pasado, cuando policías
dieron muerte a un adolescente que defendía a su padre- fueron incendiadas
por ciudadanos que protestaban frente a la alcaldía.
Luego
de la quema, las fuerzas del orden detuvieron a un niño de 13 años
como responsable de "actos de terrorismo", informó el secretario
del ayuntamiento, el panista Jesús López.
En este municipio, un policía disparó el
jueves a la cabeza de Juan García Franco, de 18 años, cuando
defendía su casa de un grupo de uniformados que pretendieron ingresar
sin orden de aprehensión para detener a su padre tras un pleito
callejero.
Tras el asesinato los lugareños pretendieron tomar
la alcaldía que, para ese momento, ya era resguardada por la policía
de Salvatierra, Cortázar, Celaya y Juventino Rosas, acción
que se justifica por la existencia de un convenio de colaboración
intermunicipal de seguridad pública.
La tensión continuó hasta la noche del viernes,
cuando la gente realizó una segunda protesta frente a la presidencia
municipal, donde se encontraban estacionados los vehículos 00-421
y 00-418 de la policía de Cortázar, mismas que quemaron.
Las llamas alcanzaron parte de la puerta principal de la alcaldía.
El jefe de la policía, Salvador Juárez,
dijo que fue un error de los tripulantes de esas patrullas estacionarlas
frente a la presidencia. "Sabíamos que se podía tomar como
un acto de provocación", dijo.
Tras el incidente las corporaciones redoblaron la vigilancia
y detuvieron a José Martín Sierra Guerrero, de 13 años,
señalado como el presunto responsable de lo que el secretario del
ayuntamiento de Juventino Rosas, el panista Jesús López,
calificó como "un acto de terrorismo".
Desde León, el gobernador Juan Carlos Romero Hicks
repudió los actos de violencia que se vivieron en aquella localidad
y consideró que urge abrir los canales de diálogo para evitar
mayor confrontación.
Ofreció todo el apoyo de su gobierno para los deudos
del joven y giró instrucciones a fin de que se investigue los hechos.
Juan Manuel Oliva, secretario de Gobierno del estado,
negó que este hecho, aunado a la violencia ocurrida en meses pasados
en San Luis de la Paz, Irapuato, Romita y más recientemente en Juventino
Rosas, obedezcan a una situación de ingobernabilidad y donde se
privilegie la represión y no el diálogo.
"Creemos que la sociedad está contenta con los
gobiernos del PAN y éste es un evento que no tiene matices de ingobernabilidad",
finalizó.