Nada importante, afirma

Carpizo, dispuesto a hacer precisiones al informe de PGR

Luego del informe que rindió ayer la subprocuradora María de la Luz Lima Malvido sobre el asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, el ex procurador general de la República Jorge Carpizo aseguró que está dispuesto a "hacer las precisiones que me constan" respecto a las consideraciones de que en su tiempo al frente de la PGR hubo omisiones y anomalías en las investigaciones del caso.

No es posible comentar las nuevas indagatorias, expuso Carpizo en un comunicado leído en Radio Red, porque nada se informó al respecto. No deja de preocupar, indicó, que se mencionó sólo a cuatro personas, entre ellas José Humberto Rodríguez Bañuelos, La Rana, uno de los sicarios más sanguinarios del cártel de los hermanos Arellano Félix.

También se cita a Enrique Harari, quien en tres declaraciones ministeriales manifestó no tener mayor información sobre el caso Posadas. Habrá cambiado sus afirmaciones en una cuarta declaración, refirió Carpizo.

Otro de ellos es Benjamín Arellano, del que sólo cabría decir que el día del crimen sus hermanos Ramón y Javier estuvieron en el aeropuerto de Guadalajara.

La coartada del sacerdote Montaño respecto a la alteración que se hizo del libro de bautismo fue precisamente para favorecer a Javier Arellano, estimó Carpizo. Benjamín fue mencionado, pero "nunca se comprobó su presencia y sólo ha intentado confundir a la opinión pública".

Carpizo dijo no encontrar razón suficiente para "ocultar durante un año" que la averiguación previa fue retirada de la reserva. Lo único importante en el caso lo constituyen las pruebas jurídicas contenidas en la averiguación previa, y "estoy dispuesto, como siempre lo he estado, a presentar cualquier declaración respecto a lo realizado en el caso Posadas".

Espero que las nuevas autoridades puedan encontrar otros elementos que no hayan sido determinados por seis procuradores, dijo.