Afecta sobreoferta al sector acerero de América Latina

ESTHER HERRERA CERVANTES CORRESPONSAL

Monterrey, NL, 1o. de febrero. En los pasados 10 años, el sector acerero en América Latina ha sido de los más golpeados y el problema de la sobreoferta persistirá durante este año.

Empresas como Hylsamex, IMSA y AHMSA, compañías integradas, tienen en riesgo la viabilidad de negocio a mediano plazo. Aunque Hylsamex posee una posición privilegiada en relación con sus contrapartes, debido a su capacidad de desarrollo tecnológico, no ha resuelto su problema de liquidez.

Nicolás J. Hendrichs, investigador del Tecnológico de Monterrey, analista y autor del estudio El plástico como sustituto del acero, sostiene que para las acereras Sicartsa, APM, Sidor y Villacero el futuro no es tan dramático, ya que atienden nichos específicos no tan saturados.

Dumping y crisis energética

El futuro inmediato de la industria del acero en México y América Latina apunta a seguir en esa crisis recurrente, acompañada de los problemas de dumping y problemas energéticos.

El también director del Programa Líderes para la Manufactura, de la Escuela de Graduados del Tecnológico de Monterrey, visualiza dos caminos: o se da la consolidación de las acereras mexicanas o empezarán las ventas de las acereras y los cierres definitivos.

Las acereras que no están integradas, como Villacero, APM, Sicartsa y Sidor, tienen mayor margen de maniobra para perdurar; parece contradictorio que la acerera integrada tenga más problemas, señaló.

Hasta el momento las consolidaciones fuertes han ocurrido en Europa, hace una década pasó en Oriente y en Norteamérica y ahora le toca el turno a Sudamérica y a México. Se puede dar todavía un cambio de jugadores en un mercado que está en reacomodo.

Es decir, que a la industria del acero en México le ocurrirá lo mismo que a la banca nacional, el mismo proceso de extranjerización está apenas por darse. La consolidación del sector no se dará en tanto no se defina el número de jugadores y quiénes serán los nuevos protagonistas de la industria en el mercado nacional.

Históricamente, dijo el investigador, la acerería era considerada en todos los países del mundo un sector estratégico, pero esto ha quedado atrás después de los procesos de reprivatización de las empresas y del mismo impacto de la globalización en las economías.

La crisis energética no se ha resuelto y mientras así siga, el problema del sector continuará en ese círculo de crisis recurrentes, ya sea por el precio, el abasto y por la sobreoferta a nivel mundial.

La regulación ambiental será otro elemento que se agregará a este panorama, convirtiéndose en un gran reto a vencer en los próximos dos y cinco años.

La coexistencia de las acereras con el medio ambiente no ha sido nada amigable y, así como a la industria química empezó a recibir fuerte presión social por las regulaciones ambientales, las acereras recorrerán ese mismo camino. Esto pone, sin duda, en desventaja a aquellas compañías que no han incursionado en la innovación y en el desarrollo tecnológico.