Zacatecas, Zac. Los más de 60 mil productores de frijol del estado de Zacatecas, enfrentan una grave crisis en un año de cosecha extraordinariamente buena: más de 350 mil toneladas de la leguminosa han sido cosechadas, lo que confirma el liderazgo nacional en la producción de este grano, pero se enfrenta un dilema que comparten los estados de Durango y Chihuahua, números 2 y 3 en el ranking de cosechas: el gobierno federal ha sido incapaz de poner en operación los centros de acopio para almacenar el frijol del ciclo agrícola recién finalizado.
Líderes y dirigentes advierten que el problema es el centralismo burocrático de María Luisa Albores, titular de Alimentación para el Bienestar, dependencia federal que sólo en el caso de Zacatecas, requiere más de 1 mil 800 millones de pesos, para comenzar a adquirir un porcentaje de aproximadamente el 30 por ciento de la cosecha total del presente ciclo agrícola primavera verano.
El problema es crítico, porque las autoridades federales, en coordinación con el gobierno estatal, tienen más de un mes de retraso en el arranque del acopio de frijol. Las cosechas de frijol se “levantan”, en el mes de octubre. Dos dependencias en particular, la Secretaría de Agricultura federal y la Secretaría del Campo estatal, se habían comprometido a entregar decenas de miles de costales nuevos, para el acopio de frijol, el día 3 de noviembre, y el arranque del acopio –de unas 120 mil toneladas de las 350 mil toneladas cosechadas-, sería el 10 de diciembre. Así lo anunció incluso en un acto público, el gobernador David Monreal Ávila. Pero no se entregaron los costales ni los centros de acopio se abrieron.
Para mediados de noviembre, los campesinos comenzaron a realizar protestas generalizadas por la falta de apertura de los centros de acopio, pues es ahí donde a los productores se les recibirá su frijol, al precio de garantía ofrecido a principios de este año por la presidenta Claudia Sheinbaum: 27 pesos el kilogramo. Pero ahora, a unas horas de cumplirse el plazo del 10 de diciembre, de haber “pateado el bote”, un mes, no hay certeza de que los centros de acopio, comiencen a operar.
Sin los centros de acopio oficiales abiertos, los coyotes – intermediarios (muchos de ellos asociados a grupos del crimen organizado), han presionado directamente a los campesinos que, desesperados ante la falta de dinero, pues invirtieron fuertes sumas de dinero en el corte y trilla del frijol, han tenido que vender a muy bajo precio parte de sus cosechas: desde 7 pesos a 13 pesos el kilogramo, una pérdida severa para ellos. La desesperación de los productores de frijol fue manifiesta, en las pasadas protestas por la nueva Ley de Aguas Nacionales, a la que ellos se sumaron.
En entrevista con este diario, Jesús Padilla Estrada –quien años atrás fungió en dos gobiernos estatales distintos como Secretario del Campo y ha sido también diputado local y coordinador de la comisión de agricultura-, lo dijo claro, en representación de los campesinos:
“Queremos saber exactamente, hemos escuchado voces aisladas de un lugar, de otro y de otro, donde dicen los campesinos que los centros de acopio todavía no están funcionando, como hubo los compromisos y los acuerdos de hace un mes aproximadamente”, de funcionarios federales.
El problema aseguró Padilla Estrada, se repite en Durango y Chihuahua, donde los productores comparten la misma información: “la lentitud es demasiada, eso sí, puedo afirmarlo. Está muy lento el programa… el grave problema de esto es una centralización desmedida (de Alimentación para el Bienestar, antes Segalmex).
“No es propio nada más de Zacatecas, hemos escuchado noticias de Chihuahua está parecido y Durango igual… nos fuimos todos con la finta de la promesa que hicieron las autoridades del Gobierno federal, encabezadas por este la maestra María Luisa Albores, y fallaron, el programa de acopio de frijol no está operando. Como lo hemos convenido, como se levantó incluso un acta, una minuta”.
Lo más grave, es que el problema se ha acumulado desde el año pasado, ya que la mayoría de las bodegas habilitadas como 52 centros de acopio, no pueden “abrirse” para recibir el nuevo frijol, porque aún tienen almacenadas más de 20 mil toneladas de frijol, del año 2024. Por cuestiones técnicas y de sanidad, no deben “juntarse”. Nuevamente, se señala como responsable, al gobierno federal.