°C -
|

La Jornada

Últimas noticias
Anuncio
Anuncio

Nosotros ya no somos los mismos

Imagen
El ex presidente de México Felipe Calderón Hinojosa fue un niño atribulado, pero ambicioso y hábil en los círculos estudiantiles. Foto María Melendez Parada
11 de noviembre de 2024 08:19

En mis usuales releídas al monstruo Rulfo, me topé con una de sus certeras reflexiones que luego descubrí, también había llamado la atención de la escritora argentina Olga Wornat, autora de diversos libros que han cimbrado amplias audiencias en razón de la audacia con la que aborda asuntos políticos que inmiscuyen a las más altas esferas gubernamentales de los países a los que dedica sus investigaciones. Transcribo los renglones del maestro Rulfo: Quizás entonces se volvió malo o quizás ya era de nacimiento. La expresión cayó como anillo al dedo (alguno de los cinco tendrá que servir) para explicar mejor el asunto que comenzamos a tratar la semana pasada: perfilar la caracterología síquica, física, emocional, cultural de un individuo.

En una de las series policiacas a las que soy adicto, se le llama el ignoto a todo individuo del que se sospecha sea el autor de graves delitos pero del que se ignora su identidad. De él se conocen rasgos de su personalidad que permiten construir un esquema de su forma de sentir, pensar y obrar. Pues el caso que estamos planteando a ustedes es mucho más simple, dado que el sujeto de nuestro análisis lejos está de ser un ignoto, por lo contrario, es más que bien conocido, pues el país entero ha sido testigo involuntario no sólo de su vida privada, sino además de su participación de casi 40 años en la política nacional. Eso es precisamente lo que nos lleva a plantearnos el dilema rulfiano: ¿se volvió malo o ya lo era de nacimiento?

Pienso que vale la pena plantear esa duda en el caso concreto del personaje objeto de nuestro estudio. Esta disciplina es de ida y vuelta: podemos intentar la identificación de un ignoto por medio del estudio de sus años infantiles o deducir las acciones del presente, merced a la conocencia y valoración de su vida pasada. A Freud se le atribuye la afirmación generalmente aceptada de que infancia es destino. Hagámosla nuestra y prosigamos.

Recordemos datos definidores de la infancia de nuestro muy conocido Felipe de Jesús: fue un niño mustio, atribulado y manzurrón, pero ambicioso y hábil para la tenebra, como antes se le decía al chisme y a la juvenil intriga que privaba en las organizaciones estudiantiles como las sociedades de alumnos y demás agrupaciones. Esto poco le valió en las escuelas confesionales como las suyas, en las que predominaban los mochos y persignados entre los que no pudo sobresalir por su espíritu apocado e inseguro.

No hay registro en que se indique que él fue portero estrella del equipo de futbol Espíritu Santo, o el de pitcher fulminante, en la novena de béisbol denominada los 9 + 1 (una novena más uno). Tampoco fue un orador excepcional como fueron su padre y el ilustre panista Miguel Estrada Iturbide, considerados los mejores tribunos de su partido. Tampoco escribió ni fue un autor ni editor permanente de libros, periódicos, revistas o cualquier otra expresión partidaria, como lo fue de planta, el afectuosamente llamado Pildo Calderón.

Por cierto, Federico Ling Altamirano (secretario del CEN del PAN con Carlos Castillo Peraza), en cuyo honor se instauró la medalla que lleva su nombre y con la que se distingue a los miembros de una militancia destacada, nos compartió una conversación con Felipe de Jesús en la que, sin tapujos ni mínima consideración, ni menos prudencia, nos da a conocer sus sentimientos reales y profundos sobre su señor padre: ¡no me hables de ese señor! No tengo nada que ver con mi papá. ¡No le debo nada de lo que soy!

Y tiene razón: lo que es, por supuesto que no se lo debe a su padre. Veámoslo en una sencilla pero objetiva comparación la próxima semana.

@ortiztejeda

México SA

América Latina=desigualdad. "Cuento" de nunca acabar. Pobreza, deuda, concentración.

Bajo la lupa

Caleidoscopio de Siria: israelización, re-otomanización y des-iranización.

Astillero

Bárcena, entrampada por boda. Asistió, pero "no se enteró". 2019: González-Blanco renunció a Semarnat. Trump envía halcón a embajada.
Anuncio