Uvalde. Un joven de 18 años abrió fuego ayer en una escuela primaria de Texas, mató a 19 niños y dos maestros, en una tragedia que conmociona a Estados Unidos, donde el presidente Joe Biden exhortó a “enfrentar al lobby” de las armas.
El ataque en Uvalde, pequeña localidad ubicada a una hora de la frontera con México, es el más reciente de una ola de tiroteos en Estados Unidos, donde el horror por la violencia armada no ha logrado impulsar suficientes acciones para ponerle fin.
“¿Cuándo, por el amor de Dios, nos vamos a enfrentar al lobby de las armas?”, expresó Biden desde el salón Roosevelt de la Casa Blanca a su regreso de una gira por Asia.
“Estoy asqueado y cansado”, sostuvo, y advirtió: “tenemos que dejar claro a todos los funcionarios electos de este país: es hora de actuar”.
El mandatario ofreció un listado de eventos similares ocurridos en centros de estudio de todo el país, incluida la matanza en 2012 perpetrada en una primaria en Sandy Hook, Connecticut, en la que un ex alumno mató a 20 niños de entre 5 y 10 años, y a seis personas más.
“Desde entonces se han reportado 900 tiroteos en centros escolares”, afirmó el presidente, quien, acompañado por su esposa, Jill, ordenó colocar las banderas a media asta en todos los edificios federales.
David Brooks, corresponsal de La Jornada, documentó en estas páginas el pasado día 11 el aumento histórico en muertes por arma de fuego: https://bit.ly/3NAJF12.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, había dicho más temprano que el agresor “disparó y mató, de manera horrible e incomprensible, a 14 estudiantes y a un maestro (…) Se reporta que el sujeto disparó a su abuela justo antes de entrar a la escuela”, y añadió: “no dispongo de mayor información sobre la relación entre esos dos tiroteos”, informó el New York Times.
Abbott precisó que el atacante, identificado como Salvador Ramos, de 18 años, también había “fallecido”, y que “los agentes que respondieron al ataque lo mataron”.
El gobernador indicó que el joven, habitante de la localidad, abrió fuego en la primaria Robb, en la localidad de Uvalde, unos 135 kilómetros al oeste de San Antonio.
Ramos entró a la escuela a las 11 y media con una pistola, posiblemente un rifle, y abrió fuego, explicó el mandatario estatal.
Más tarde se confirmó que un agente de la Patrulla Fronteriza que estaba cerca cuando comenzó el tiroteo ingresó a la escuela sin esperar a los refuerzos y disparó matando al atacante, que estaba detrás de una barricada, de acuerdo con un funcionario policial, que requirió el anonimato. El agente resultó herido, pero pudo salir caminando de la escuela, aseveró la fuente policial.
El jefe de policía del distrito escolar, Pete Arredondo, declaró que el atacante actuó solo.
El Hospital Uvalde Memorial informó que recibió a 13 niños que fueron trasladados en ambulancia o autobús. El Hospital Universitario de San Antonio recibió a dos pacientes: la abuela de Ramos, de 66 años, y una niña de 10, en estado crítico.
Al cierre de esta edición, el balance de muertos era de 22 personas: 19 niños y tres adultos, incluido el agresor. Las autoridades tampoco habían precisado el número de heridos y no aludieron al saldo de 15 lesionados reportado por los dos hospitales.
El Distrito Escolar Independiente Consolidado de Uvalde manifestó que se informó de un tirador activo en la escuela, que tiene poco menos de 600 estudiantes de segundo, tercero y cuarto grados. Todos los planteles del distrito impusieron cierres de emergencia.
La escuela fue rodeada de policías con chalecos antibalas, mientras agentes de la Oficina Federal de Investigaciones entraban y salían del edificio.
Es el ataque escolar de mayor mortandad en el estado
Se trata del tiroteo escolar con mayor número de muertos en la historia de Texas, y ocurre cuatro años después de que una persona asesinó a 10 en la Secundaria Santa Fe, en el área metropolitana de Houston.
Hace menos de dos semanas, un hombre armado ultimó a tiros a 10 compradores y trabajadores de raza negra en un supermercado de Buffalo, Nueva York, en lo que las autoridades describieron como un crimen de odio.
La escuela primaria Robb se encuentra en un barrio mayoritariamente residencial de viviendas modestas.
El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Antonio Guterres, tuiteó que está “profundamente conmocionado y entristeido por el atroz tiroteo masivo. Es particularmente desgarrador que la mayoría de las víctimas sean niños”.
El gobernador Abbot calificó la matanza de “crimen sin sentido”, y su correligionario republicano, el senador texano Ted Cruz, tuiteó que él “y su esposa estaban rezando por los niños y las familias” de las víctimas en Uvalde. Ambos, además del ex presidente Donald Trump, hablarán pasado mañana en la junta anual de la Asociación Nacional del Rifle.
El consulado de México en Eagle Pass puso a disposición de la comunidad mexicana en la zona su línea de emergencias: (830) 281 1952. “Profunda tristeza expresa México por las víctimas y afectados por esta tragedia. La barbarie de nuevo”, señaló el canciller Marcelo Ebrard en redes sociales. Al cierre de esta edición, la Secretaría de Relaciones Exteriores no había reportado mexicanos afectados.
(Con información de Arturo Sánchez Jiménez)
Por lo menos 19 niños y dos maestras murieron después de que un joven disparó el martes en la Robb Elementary School en Uvalde al sur de Texas. El tirador fue abatido por la policía. Infografía Graphic News.
