Spielberg. Intratable en el Red Bull Ring, la casa de su escudería, el líder del campeonato de la Fórmula 1, Max Verstappen, se adjudicó el Gran Premio de Austria desde la posición de largada, su tercera victoria consecutiva. Sergio Pérez, quien había salido en la tercera posición de la parrilla, finalizó sexto al tener un mal día y ser penalizado 10 segundos por echar fuera de la pista a Charles Leclerc en dos ocasiones durante la carrera, lo que acabó con sus opciones de subir al podio.

Es el quinto triunfo de Verstappen en la temporada y aspirante a frenar el reinado de Lewis Hamilton (Mercedes), quien concluyó cuarto, para darle una ventaja de 32 puntos sobre el británico luego de nueve carreras.

Valtteri Bottas (Mercedes) y Lando Norris (McLaren), ocuparon el segundo y el tercer lugares, respectivamente.

Este fue otro éxito contundente para Verstappen ante miles de sus aficionados, vestidos con camiseta naranja, que celebraban la victoria 15 de su carrera, que le permite ingresar en el club de los 20 pilotos con más triunfos, igualando al inglés Jenson Button, campeón del mundo en 2009.

Un gran día para él se vio coronado por el punto extra de la vuelta más rápida. “El coche era irreal, es un trabajo excelente de todo el equipo alcanzar este nivel. Estas dos semanas fueron increíbles”, celebró Verstappen, quien venía de ganar con facilidad el GP de Estiria en el mismo trazado hace siete días y que también se llevó el triunfo en el GP de Francia el 20 de junio.

Antes de subir al podio, Vers-tappen saludó a sus seguidores, que llegaron en masa desde Países Bajos para el primer GP del año sin límite de aforo por la pandemia: “Ver a tanta gente de naranja en las gradas es increíble, fue una motivación extra, ¡muchas gracias!”.

Hamilton no ha ganado desde el GP de España hace dos meses, una pésima racha de cinco carreras para el campeón defensor. Todas esas competencias han sido para Red Bull, con el mexicano Sergio Pérez llevándose una en Azerbaiyán, el 6 de junio, en Bakú.

En su carrera número 200, Checo terminó sexto y se mantiene en el tercer lugar de la clasificación de pilotos.

Con su Red Bull volvió a protagonizar, en plena remontada, otro incidente en carrera, esta vez sacando a Charles Leclerc (Ferrari) fuera de la pista, lo que le costó cinco segundos de penalización. Cuatro vueltas después, en la 47, repitió la misma jugada ante el monegasco, y nuevamente fue penalizado con otros cinco segundos.

“Mi carrera fue un desastre”, dijo Checo, quien ofreció disculpas a Leclerc, “no es la forma en la que corro. Estábamos en el límite de las llantas, aire muy sucio y los frenos muy calientes. Seguiré adelante y volveré más fuerte”, publicó en sus redes sociales.

El mexicano tuvo una complicada actuación, pues al inicio de la carrera se fue a la grava tocado por Lando Norris, penalizado con cinco segundos. Pérez perdió posiciones para luego recuperarlas, pero no le alcanzó para estar en el podio.

Checo y otros siete pilotos fueron citados por los comisarios al no ver la bandera amarilla durante la última vuelta tras el incidente de Sebastian Vettel y Kimi Raikkonen, sin que se anunciaran sanciones.