Azerbaiyán. Con cuatro banderas rojas de por medio en los tres segmentos de la calificación, los pilotos de Red Bull, el holandés Max Verstappen y el mexicano Sergio Pérez, clasificaron en los puestos tres y seis para el Gran Premio de Azerbaiyán, donde el monegasco Charles Leclerc logró al mando de Ferrari su segunda pole consecutiva, por delante de Lewis Hamilton (Mercedes).

“Fue una calificación estúpida, pero es lo que es. Es un circuito urbano, por lo que pueden pasar estas cosas. Nuestro coche es fuerte, así que espero que mañana podamos sumar buenos puntos”, comentó Verstappen, quien tomó el liderato en la clasificación de pilotos al ganar la pasada carrera en Mónaco, con cuatro puntos de diferencia respecto a Hamilton, al tiempo que Red Bull se colocó por encima de Mercedes.

“Fue decepcionante. Estoy molesto porque debimos estar más adelante, en la primera línea cuando menos, pero no pusimos la vuelta cuando importaba”, lamentó Checo Pérez.

“En cuanto a posición en pista, la Q3 ha sido la peor del fin de semana. Al menos tenemos un ritmo de carrera que puede ser fuerte mañana”, anotó el piloto jalisciense, cuyos intentos de vuelta rápida quedaron frenados por los despistes e impactos durante toda la calificación.

La parte final de la calificación, la Q3, fue desastrosa, con una bandera roja a unos dos minutos del final por choque del japonés Yuki Tsunoda (Apha Tauri) y el español Carlos Sainz (Ferrari), el primero porque se fue directo a la valla en la curva tres, y Sainz golpeando el mu-ro tras espantarse al ver al nipón.

El favorecido fue Leclerc, quien había colocado su mejor crono temprano en la sesión, de 1:41.218, y se quedó con la pole.