Tras rechazar la propuesta de la Secretaría de Movilidad (Semovi) de condonarles 10 pesos diarios en el pago de derechos, la organización Fuerza Amplia de Transportistas (FAT) advirtió que volverá a bloquear las calles de la Ciudad de México, al tiempo que acusó a las autoridades de pretender “aniquilar económicamente al gremio para entregarlo a grandes consorcios, porque no existe dinero para que la actual administración absorba el servicio y con el mismo dinero que obtenemos nosotros lo ofrezca de la forma como nos lo exige”.

El gremio, que exige un incremento de dos pesos a la tarifa de micros, vagonetas y autobuses concesionados, dijo que ante la falta de avances en las mesas de diálogo con las autoridades, “volverán a las calles cuantas veces sea necesario para poner en la atención pública la problemática económica en que se encuentran desde hace varios años y que ya hizo crisis desde antes de la pandemia, con la cual ahora se agudizó al grado de la supervivencia”.

Nicolás Vásquez, vocero de la organización, señaló que “está visto que nos quieren aniquilar, por un lado, sin darnos el incremento a la tarifa porque no quieren asumir el costo social”, y por otro, arriesgando a quien decida escucharles fomentando empresas “con unidades de última generación, que serán insolventes en unos pocos meses porque la carga social, los impuestos y el financiamiento no lo podrán solventar con esta tarifa y tendrán que vender empresas quebradas a los grandes grupos del transporte”.

Añadió que los descuentos que les ofrecieron el jueves pasado, “con los que los trajeron un par de semanas dando vueltas a las oficinas de Movilidad, donde el secretario, Andrés Lajous, los dejó plantados, ya nos los habían ofrecido el año pasado con motivo de la negociación que realizamos el 18 de febrero”.

En ese tenor, indicó que “no seguirán esperando la burla de los funcionarios y que van a repetir la movilización que realizaron el 10 de marzo cualquier día, quizá sin previo aviso”.