Guadalajara, Jal., El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, pintó su raya de la Alianza Federalista que él mismo impulsó junto a gobernantes emanados de partidos opositores a la Cuarta Transformación, acicateado por las acusaciones de la Fiscalía General de la República en contra del gobernador panista de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca.

“En los posicionamientos que ha hecho la Alianza Federalista, yo suscribo y defiendo lo que acordamos entre todos. Pero las declaraciones que mis colegas hagan ante los medios, no necesariamente forman parte de la agenda que compartimos”, dijo en sus redes sociales el viernes para justificar su ausencia en la reunión que los “aliancistas” sostuvieron en Monterrey. Alfaro no quiso señalar directamente que su ausencia estuvo motivada por las investigaciones contra García Cabeza de Vaca, y se excusó diciendo que no estuvo en la reunión ni en la conferencia de prensa en Monterrey “por cuestiones de trabajo”.

El mandatario estatal cuidó establecer que su única adhesión a lo ocurrido el viernes en la reunión de la alianza fue que suscribió una carta de respuesta a la que a su vez les envió el presidente Andrés Manuel López Obrador y “sólo eso”.

“Los señalamientos y el tono usado para hablar de otros asuntos no acordados, como la situación que atraviesa el gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, son posturas personales que no forman parte de la agenda consensuada entre todos”, reiteró para que no hubiera dudas.