Dubai. Irán reanudó el enriquecimiento de uranio a 20 por ciento en sus instalaciones nucleares subterráneas de Fordow, un nivel de pureza que no está permitido de acuerdo con el pacto firmando en 2015 por Teherán y seis potencias mundiales, confirmó ayer el organismo de control nuclear de la Organización de Naciones Unidas.
El gobierno del presidente estadunidense, Donald Trump, calificó la decisión iraní de “extorsión nuclear”, medida considerada por los expertos como un intento de presionar al mandatario electo, Joe Biden. “Es un esfuerzo que seguirá fracasando”, advirtió un portavoz del Departamento de Estado.
La Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) señaló que “Irán comenzó ayer a bombear uranio enriquecido hasta en 4.1 por ciento en seis cascadas de centrífugas en la planta de enriquecimiento de combustible de Fordow para un mayor enriquecimiento hasta en 20 por ciento”, y pidió a la república islámica que respete el pacto de 2015.
Israel llamó a la comunidad internacional a “una respuesta firme” ante esta decisión de Irán.
La medida es la última de una serie reciente de rupturas del acuerdo por parte de Irán, que comenzó a violar el pacto en 2019 en represalia por la retirada de Washington del tratado y la reimposición de sanciones estadunidenses.
Horas antes, el portavoz del gobierno iraní, Ali Rabiei, informó que el país comenzó a enriquecer uranio a 20 por ciento en la instalación nuclear de Fordow.
En otro orden, Irán incautó un petrolero de bandera sudcoreana en el golfo Pérsico. El buque, con destino a los Emiratos Árabes Unidos, transportaba productos químicos y fue detenido por contaminar.
