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La enfermedad venosa crónica afecta a 84% de adultos en el mundo

Mujeres, mayoría de quienes la padecen

 
Periódico La Jornada
Jueves 4 de diciembre de 2025, p. 12

Un estudio internacional con más de 90 mil adultos en Europa, Latinoamérica y Asia arrojó que 84 por ciento de los evaluados presenta algún grado de enfermedad venosa crónica, expusieron especialistas en terapias de compresión.

En conferencia virtual, la enfermera María Fernanda Morales detalló que se estima que 77 por ciento de las mujeres y 57 por ciento de los hombres adultos tienen algún grado de insuficiencia venosa crónica, así como que dos de cada 10 personas con varices desarrollarán una úlcera venosa, es decir, una llaga abierta crónica en las piernas por circulación sanguínea deficiente.

Entre los factores de riesgo están la edad, pues entre más años se cumplen son mayores las posibilidades de padecerla. “Sabemos que cuando cumplimos 65 años o más el riesgo crónico se triplica”.

También incide en su desarrollo el sedentarismo, agregó, así como la obesidad, el embarazo, los cambios hormonales, la herencia genética, los traumatismos, el uso continuo de zapatos de tacón y la ropa ajustada.

Algunos síntomas y signos son dolor en las piernas, sensación de comezón o quemazón, calambres nocturnos, adormecimiento, cansancio y pesadez e hinchazón, así como cambios en la coloración de la piel.

Leticia Maya, experta en terapia de compresión, expuso que, en promedio, 80 por ciento de quienes tienen insuficiencia venosa crónica se encuentran en el primer estadio, es decir presentan arañitas vasculares o telangiectasias, y sólo entre uno y 2 por ciento de la población con la enfermedad llega a desarrollar una úlcera venosa.

Las especialistas indicaron que este padecimiento no se manifiesta sólo de manera física, sino también tiene un alto impacto emocional. Los pacientes “reportan alteraciones del sueño, frustración, vergüenza o resignación debido al estigma asociado con los tratamientos visibles. Los calambres, el hormigueo nocturno y la sensación de pesadez afectan el descanso, la productividad y la calidad de vida, generando un desgaste que va más allá de lo corporal”, comentaron.

Advirtieron que muchas personas creen que la única opción es convivir con el dolor o disimular los síntomas; sin embargo, existen soluciones que permiten actuar a tiempo. Una de las más recomendadas, explicaron, es la terapia con medias de compresión, “un tratamiento que mejora el retorno venoso, reduce los síntomas y previene complicaciones mayores, como úlceras o trombosis.”