La Casa Blanca reitera que Maduro trafica drogas
Bajo el derecho internacional, ofensiva a 11 personas en una lancha está lejos de representar uso legítimo de fuerza, señalan especialistas

Miércoles 10 de septiembre de 2025, p. 27
Washington. El gobierno de Donald Trump está sentando las bases para acciones militares adicionales contra Venezuela, mientras que algunos legisladores, expertos dentro y fuera del Pentágono y analistas afirman que la decisión de asesinar a 11 personas en una lancha cerca de las costas venezolanas fue una violacion de la ley estadunidense y el derecho internacional.
Además de desplegar ocho naves de guerra, aeronaves de vigilancia y un submarino en el Caribe cerca de Venezuela con la misión oficial de combatir el narcoterrorismo, autorizado por una orden aún secreta firmada por el presidente Donald Trump en julio, ahora el Pentágono colocó 10 aviones caza F-35 en Puerto Rico a fines de la semana pasada. Un grupo de las naves con capacidad anfibia transporta 4 mil 500 marineros, y otra nave tiene una fuerza de expedición con dos mil 200 marines.
Una y otra vez, la Casa Blanca, el Departamento de Estado y el Pentágono han reiterado que tienen todo el derecho de usar fuerza letal contra lo que ahora han etiquetado como narcoterroristas. Más aún, en respuesta a si el gobierno de Trump está contemplando atacar al gobierno de Venezuela, el mandatario señaló: “el mundo sabrá pronto”.
“El gobierno de Trump está evaluando opciones militares adicionales contra Venezuela si el régimen de Nicolás Maduro no intensifica su presión sobre cárteles de droga”, comentaron fuentes militares estadunidenses a los reporteros Ken Klipperstein y Bill Arkin esta semana. “Deshabilitar un campo aéreo militar es considerado como una de las operaciones de riesgo más bajo que se podria llevar a cabo si es que se decide atacar Venezuela”, agregaron las fuentes castrenses.
La vocera de la Casa Blanca, Karoline Levitt, reiteró ayer que el gobierno venezolano está traficando drogas ilícitas letales a Estados Unidos, pero rehusó aclarar el comentario que realizó Trump el domingo de que el mundo se enterará próximamente sobre si se lanzarán mayores acciones militares. La vocera había aclarado antes que la línea oficial es que “el régimen de Maduro no es el gobierno legítimo de Venezuela. Es un cártel de narco-terror”.
Washington, sin fuerza militar para invasión
Estados Unidos no cuenta con suficientes fuerzas militares en la región para lanzar una invasión plena de Venezuela, opina Ryan Berg del Center for Strategic and International Studies en Washington, pero puntualiza que “aún hay muchas opciones” para diversos tipos de acción castrense. Señaló que Puerto Rico, isla que el secretario de Defensa Pete Hegseth visitó el lunes, es el lugar más obvio y cercano a Caracas para preparar una acción de ese tipo.
Todas estas amenazas después del ataque contra la lancha en aguas internacionales están provocando alarma incluso dentro del gobierno en Washington.
“Estados Unidos ahora está atacando directamente a civiles. Narcotraficantes pueden ser criminales, pero no son combatientes”, comentó un oficial militar de alto rango del Departamento de Defensa al medio de investigación The Intercept.
Después de una semana, el gobierno estadunidense aun no ha presentado pruebas en público de que las 11 personas en la lancha destruida por Estados Unidos eran narcotraficantes.
Un ex abogado de alto nivel, Todd Huntley, comentó también a The Intercept que “bajo el derecho internacional, no hay manera de que esto esté cerca de ser un uso legítimo de fuerza”.
Nutriendo la especulación de otro ataque más, The New York Times reportó ayer que la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, ha “retractado” un informe emitido por analistas de inteligencia a inicios de este año que concluía que era “poco probable” que el presidente Maduro controle al cártel Tren de Aragua.
Parte de la justificación de Trump de la ofensiva contra la lancha, que sirve también para continuar amenazando a Venezuela, es que el mandatario venezolano controla ese cártel, una narrativa que el informe de inteligencia estaba contradiciendo hasta ahora.
Ante todo esto, varios legisladores federales también han expresado creciente preocupación en torno a las maniobras belicistas del presidente.
Respondiendo al festejo del vicepresidente J.D. Vance a la agresión contra la embarcación, el senador republicano Rand Paul señaló: “¿Alguna vez se preguntó qué podría suceder si los acusados (de algún delito) fueran ejecutados sin juicio o representación?”.
El diputado federal demócrata, Jesús Chuy García, declaró que “el Congreso no autorizó la arremetida (contra la lancha), donde no existió el debido proceso, y el pueblo estadunidense se opone de manera abrumadora a las guerras sin fin”.
“Este ataque extrajudicial es un peligroso abuso de poder. Debemos actuar en el Congreso para frenar cualquier escalada antes de que nos arrastre a otro conflicto innecesario”, subrayó.
Sin pruebas convicentes para realizar arremetida
“No hay ninguna justificación legal concebible para éste uso de fuerza. Al menos de que se presenten pruebas convincentes de que estaban actuando en defensa propia, ese embate es una violacion clara de la ley internacional”, afirmó la diputada federal demócrata Ilhan Omar.
“La postura de Estados Unidos sobre la erradicación de drogas ha causado daños incalculables a través de nuestro hemisferio y ha llevado al desplazamiento forzado masivo, devastación ambiental, violencia y violaciones de derechos humanos. Sin embargo, no ha hecho siquiera un daño mínimo al narcotráfico o a los cárteles. Se trata de un fracaso dramático y profundo a todo nivel”, aseveró.
El diputado federal Greg Casar, quien preside el caucus progresista del Congreso, ha presentado una enmienda a un proyecto de ley sobre asuntos militares pendiente con el propósito de bloquear fondos para cualquier uso de fuerza militar “dentro o contra Venezuela”.
Pese a ello, tal como escribe el periodista Connor Echols en la revista digital sobre política internacional Responsible Statecraft, “mientras muchos legisladores se movieron rápidamente para condenar los ataques de Trump contra Irán este año, notablemente pocos han demostrado el mismo nivel de entusiasmo cuando se trata de Venezuela”.