Conoce a detalle las venas de la ciudad // Ha permanecido hasta 4 horas en ellas

Martes 26 de agosto de 2025, p. 29
Con 42 años de trayectoria, Julio César Cu Cámara, considerado el único buzo de aguas negras en el mundo, a sus 64 años continúa descendiendo a las profundidades de las plantas de bombeo para dar mantenimiento a compuertas y rejillas, con el propósito de prevenir inundaciones graves.
Su labor no se limita al mantenimiento hidráulico, sino también ha colaborado en la búsqueda y rescate de personas a solicitud de la Fiscalía General de Justicia, en diligencias donde participan el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas, la Cruz Roja, el Cuerpo de Bomberos e incluso la Guardia Nacional y la Secretaría de Marina.
Estas maniobras, dijo, pueden prolongarse entre dos y cuatro horas, dependiendo de la complejidad de la maniobra, ya que no todos los trabajos de este tipo son iguales; por ejemplo, como cuando los bomberos suelen emplear ganchos para localizar algún cuerpo.
Relató que conoce a detalle las entrañas de la ciudad, pues ha trabajado en la plantas de bombeo San Gregorio, en Xochimilco; en Aculco, en Iztacalco y en el drenaje profundo, donde ha tenido que retirar desde lonas hasta animales muertos y partes de automóviles, y enfatizó que la principal causa de las inundaciones esta temporada es por la basura arrojada en las coladeras, desechos que, apuntó, se han incrementado en los años recientes por la densidad poblacional.
El buzo explicó que el equipo que utiliza –un traje especial que incluye una escafandra y herramientas– pesa alrededor de 70 kilos, aunque bajo el agua la carga deja de sentirse, y aseguró que por ahora no piensa jubilarse.
Sin embargo, advirtió que aún no hay alguien que continúe con su labor, ya que aunque se han encontrado buzos, “no hay quien quiera quedarse en este trabajo”, debido a que implica sumergirse en aguas contaminadas, y una vez saliendo de ellas se queda un olor penetrante.