Faltó Tláloc, clamor en festejo por 700 años de México-Tenochtitlan

Memoria luminosa: México-Tenochtitlan 700 años, proyectó imágenes de la historia de México.Foto María Luisa Severiano
Sábado 12 de julio de 2025, p. a27
Las nubes se arremolinaron sobre el Zócalo para dejar sentir su furia. Es Tláloc, porque no lo tomaron en cuenta
, dijo una señora totalmente empapada mientras huía a guarecerse en los portales de los edificios aledaños, como lo hicieron cientos, acaso miles más de personas que se congregaron anoche para el estreno de Memoria luminosa: México-Tenochtitlan 700 años
.
El comentario vino a cuenta porque sobre la plancha del primer cuadro capitalino, como parte de ese espectáculo de videomapping con el que el gobierno local celebra las siete centurias de la fundación de la gran capital mexica, se colocaron reproducciones monumentales (de 12 metros de altura) de cinco de las más sorprendentes esculturas mexicas descubiertas hasta la fecha:
Coatlicue, hallada en agosto de 1790; Tlaltecuhtli, en octubre de 2006; Piedra del Sol, diciembre de 1790; Coyolxauhqui, febrero de 1978, y Teocalli de la guerra sagrada, de 1926. Faltó Tláloc
, insistieron otras voces.
Los presagios más funestos indicaban que, dado el temporal, la función se cancelaría. Lo que sí se suspendió fue el acto protocolario anunciado a las 19 horas, que encabezaría la jefa de Gobierno, Clara Brugada.
No era una llovizna tímida, sino una tormenta cerrada que hizo tambalear paraguas y convirtió el suelo en espejo de los relámpagos. Aun así, como reza la conocida frase The show must go on, el acto no se detuvo e incluso adelantó su comienzo 15 minutos, a las 8 de la noche.
La lluvia amainó y los 800 metros cuadrados de las fachadas de la Catedral Metropolitana y el Palacio Nacional sirvieron como una enorme pantalla donde una serie de animaciones, acompañadas de sonido envolvente, narró en apenas una hora los siete siglos de esplendor de la hoy Ciudad de México.
Una historia que se remonta al año 2 caña mexica (1325, en el calendario occidental), con la llegada de un pueblo errante a un islote rodeado de serpientes y águilas, y que culmina en la actualidad con una ciudad que ha enfrentado grandes luchas por su transformación.
El videomapping, cuyo guion y dirección son obra de Árgel Gómez, subsecretario de Cultura, teje algunas de las principales gestas y transformaciones ocurridas en la antigua Tenochtitlan a lo largo de su historia.
Mientras las imágenes monumentales se suceden sobre las fachadas de los recintos históricos, una voz femenina y otra masculina narran el establecimiento y crecimiento de la capital tenochca, la llegada de los conquistadores encabezados por Hernán Cortés, la caída de la urbe mexica, el surgimiento de la Nueva España con sus instituciones coloniales, su sistema de castas y el afán de desecar el territorio.
Vinieron otros pasajes: la lucha por la Independencia, la entrada triunfal del Ejército Trigarante en 1821, la invasión estadunidense de 1847, la Guerra de Reforma, el Imperio de Maximiliano de Habsburgo, el restablecimiento de la República con Benito Juárez.
La Revolución, la expropiación petrolera, la efervescencia cultural, las movilizaciones sociales como la estudiantil de 1968, los mundiales de futbol de 1970 y 1986, el sismo de 1985 y la organización social que impulsó, hasta llegar a nuestros días, con una ciudad que ha sido testigo, parte y escenario de la construcción democrática del país.
Memoria luminosa: México-Tenochtitlan 700 años se presentará hasta el 27 de julio, a las 20 y 21:30 horas, con acceso gratuito.