Viernes 27 de junio de 2025, p. 9
El tráfico internacional de drogas sigue siendo una de las principales fuentes de ingresos para las organizaciones criminales en el mundo y representa una carga económica significativa para varios países, según el Informe Mundial sobre Drogas 2025, publicado ayer por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.
De acuerdo con el reporte, en México los flujos financieros ilícitos vinculados al tráfico de drogas –que incluyen tanto las ganancias por exportación como los pagos por insumos o precursores– equivalen a alrededor de uno por ciento del producto interno bruto (PIB) nacional.
Sólo la exportación de cocaína, metanfetamina y heroína generó en conjunto más de 12 mil millones de dólares anuales.
El documento de la ONU subraya que aunque no existen estimaciones globales completas, los datos disponibles en ciertas regiones dan idea de la magnitud del problema. Sólo en Estados Unidos, el mercado minorista de drogas generó 146 mil millones de dólares en 2016, cifra equivalente a 0.8 por ciento del PIB del país.
El informe destaca la evolución de las organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico, que han pasado de estructuras jerárquicas a redes descentralizadas y especializadas, con grupos que actúan como proveedores de servicios en etapas específicas de la cadena: transporte, lavado de dinero, corrupción o distribución. Esta diversificación complica los esfuerzos por contener sus operaciones y reduce la eficacia de las estrategias tradicionales de desarticulación, como el arresto de líderes, que en algunos contextos sólo provoca mayor fragmentación y violencia.