Jueves 12 de junio de 2025, p. 25
Chilpancingo, Gro., Campesinos ecologistas de comunidades de la Sierra Madre del Sur, ubicadas en el municipio de Coyuca de Catalán, en la Tierra Caliente de Guerrero, solicitaron a la presidenta Claudia Sheinbaum la instalación de una Base de Operaciones Mixtas en esa zona para evitar el ingreso de grupos criminales, como ocurrió el pasado domingo, cuando fueron atacados por presuntos miembros de La familia michoacana.
En un comunicado, los lugareños expusieron que durante años han protegido los ejidos que se ubican dentro de una reserva ecológica e impedido el asentamiento de empresas mineras en la región.
Labriegos de los ejidos El Balcón,El Alambrado, Los Arrozales, Sole-dad de la Palma, Barranca del Sereno y El Nogal resguardan voluntariamente 25 mil hectáreas, mil de ellas para la conservación de la natu-raleza y la fauna, afirmó Saúl Carecía García, presidente del Consejo de Vigilancia de Áreas Protegidas.
Agradecieron que luego de las agresiones de la La familia michoacana en su contra, “vinieron el Ejército, la Guardia Nacional y la Policía Estatal, pero pedimos una Base de Operaciones Mixta para que nos brinde seguridad a los cuatro ejidos afectados: El Balcón de la Bandera, Soledad de la Palma, Río Frío de los Fresnos y El Carrizal, de unos 3 mil habitantes en conjunto.
“Queremos la base en la comunidad de Puerto Las Ollas (donde se centraron los ataques de La familia Michoacana ocurridos el domingo y lunes pasados) para que nos brinden seguridad”, demandaron.
Recordaron que esos días fuimos atacados con balazos, bombas y drones; quemaron casas con mujeres y niños adentro, y saquearon la comunidad; queremos que nos apoyen con víveres y medicamentos, ya que (la delincuencia) tiene cerrados los caminos. Al que baja por víveres le quitan el carro o cuatrimoto, y lo matan. En (el pueblo) El Nogal asesinaron violentamente a un joven trabajador que andaba con sus vacas
.
Asimismo, vía telefónica, fuentes en la región aseguraron que decenas de hombres, mujeres, jóvenes y adultos huyeron de pueblos aledaños a Puerto Las Ollas para no ser reclutados por el crimen organizado, no obstante que nueve patrullas de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano resguardan los alrededores.