Durante el segundo encuentro del Frente Internacional Minero, convocado por el senador Napoleón Gómez Urrutia (Morena), dirigentes de Argentina, Canadá y Perú coincidieron en la urgencia de luchar de manera conjunta.

El objetivo, dijeron, es hacer frente a los grandes conglomerados, que como Newmont, la principal productora de oro del mundo, o Grupo México, de Germán Larrea, sólo pretenden incrementar sus utilidades a costa de violentar los derechos de los trabajadores.

Si las grandes corporaciones globalizan sus políticas y prácticas laborales para maximizar sus utilidades y aumentar la explotación, nosotros debemos internacionalizar la lucha sindical para defender nuestros derechos, advirtió el también dirigente del Sindicato Nacional Minero.

Si las empresas se reúnen en foros económicos internacionales para discutir estrategias encaminadas a incrementar sus riquezas, ¿por qué los trabajadores no podríamos reunirnos para plantear mecanismos de defensa colectiva, agregó. En ese encuentro se narraron conflictos con Newmont que han enfrentado mineros de México, Perú y Argentina.

La situación actual, advirtió, nos obliga a mantenernos unidos, porque sólo con acciones coordinadas podremos enfrentar las acciones violatorias que transgreden nuestra dignidad como trabajadores y atentan contra el bienestar de nuestras familias, insistió Gómez Urrutia, quien expuso que en la planta de Peñasquito, ubicada en Zacatecas, protagonizaron una huelga de 120 días en contra de Newmont, que se negaba al reparto de utilidades y a resolver otras violaciones al contrato colectivo de trabajo de los integrantes de la sección 304 del Sindicato Minero.

A su vez, Ulises Martos Machuca, líder del Sindicato de Trabajadores de la Compañía Minera de Yanacocha de Perú, expuso que paralizaron labores debido a que la empresa, también propiedad de Newmont, pretende disminuir servicios operativos y restringir la libertad gremial, y en represalia, despidió a 91 obreros. El problema, comentó, es que la legislación en Perú es muy blanda y permite a los patrones abusar.

Tenemos una sana envidia con las leyes del trabajo de México, Argentina y de Canadá, agregó. Destacó que coincide con la necesidad de que la defensa de los derechos de los mineros trascienda fronteras y se consolide nuestra esperanza en la lucha internacional.

Por su parte, Germán Choves, representante de la Asociación Sindical del Personal Jerárquico, Profesional y Técnico de Actividad Minera Argentina, advirtió que es fundamental ampliar ese naciente Fondo Minero Internacional para que incluya a todos los trabajadores de esa industria extractiva, sobre todo en momentos en que surgen gobiernos neoliberales, como el de Javier Milei, en su país.

Explicó que la reforma puesta en marcha por Milei es brutal y pretende una regresión a la época de Carlos Menem o de la dictadura militar para beneficiar a las 20 familias dueñas de Argentina y empobrecer más a las mayorías.

Fue una jornada intensa, de intercambio de problemas y propuestas. El director del Sindicato de United Steelworkers de Canadá, Myles Sullivan, coincidió en que ese Frente Internacional Minero debe consolidarse para tener más fuerza y poder combatir a las grandes compañías mineras que vulneran los derechos de sus trabajadores.