Al cumplirse ayer cinco años de la sentencia que emitió la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Coridh) en favor de las 11 mujeres sobrevivientes de tortura sexual por agentes federales y estatales, tras la represión en 2006 en San Salvador Atenco, estado de México, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) denunció que los hechos siguen impunes.

La Fiscalía General de la República (FGR) no ha investigado de manera integral la tortura sexual como lo ordenó la Coridh y aún debe indagar responsabilidades en la cadena de mando durante la planificación e implementación del operativo del 3 y 4 mayo de 2006, aseguró.

Asimismo, destacó que el Estado aún no establece el observatorio independiente ordenado por la Corte Interamericana como garantía de no repetición para monitorear y fiscalizar el uso de la fuerza de la Guardia Nacional.

En redes sociales, el Centro ­Prodh también indicó que la puesta en práctica de reparaciones individuales, como la atención a la salud física y sicológica de las mujeres, enfrenta obstáculos graves en su cumplimiento ante la insensibilidad y falta de coordinación de las instituciones.

Resaltó que con la frente en alto las mujeres de Atenco han denunciado por casi 18 años la persistencia de la tortura sexual en México y que la falta de acceso a la justicia en éste y otros casos continúa siendo un pendiente del Estado mexicano.