Miércoles 2 de febrero de 2022, p. 12
El gobierno mexicano denunciará ante la Organización de Naciones Unidas los daños ambientales provocados por la empresa Calizas Industriales del Carmen (Calica), de la estadunidense Legacy Vulcan, en 400 hectáreas de la zona de Playa del Carmen, Quintana Roo, advirtió el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Por lo pronto, instruyó al embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma, tratar el asunto con el presidente de esa compañía y eventualmente alcanzar un acuerdo para fijar algún tipo de convenio comercial, pero advirtió que si el consorcio opta por las demandas internacionales contra nuestro país –como la interpuesta en septiembre de 2018 en el marco del acuerdo comercial de América del Norte– su gobierno hará lo propio.
Sí, si no hay acuerdo. Y no es amenaza ni advertencia, es sencillamente que ya se acabó la impunidad
, dijo en conferencia de prensa.
En una larga exposición acerca de que en su gobierno no hay cabida para corruptos, el influyentismo y la impunidad, subrayó que no permitirá despojos ni daños como los ocurridos en el cerro de San Pedro, en San Luis Potosí; en Mexicali, con la entrega del agua de la ciudad a una cervecera; la explotación de mantos acuíferos al extremo de enfermar a la población, como en la región de la Laguna, o las afectaciones a los vastos recursos naturales en el sureste de México.
Empresa pide compensación de 1,500 mdd
Legacy Vulcan-Calica obtuvo un permiso el último día del sexenio de Ernesto Zedillo (1994-2000) para extraer piedra caliza y otros materiales para la construcción trasladados vía marítima a Estados Unidos. Cuando se le canceló la concesión, esta compañía demandó una compensación de más de mil 500 millones de dólares más intereses.
El Presidente mencionó el caso el lunes pasado y reprochó la autorización del gobierno zedillista, así como a su entonces titular de Medio Ambiente, Julia Carabias.
Después de hacer un repaso de las principales acciones de su administración en favor del medio ambiente (limitar la extracción de crudo, modernizar las hidroeléctricas, impulsar un programa de reforestación y no dar más concesiones mineras, entre otras), trajo de nuevo a cuenta el caso Legacy Vulcan.
Lamentó que ese permiso, por dos décadas, sirvió para cavar y sacar recursos naturales a mil metros de la playa y del mar turquesa, una de las zonas más bellas del mundo. Siempre el doble discurso, la doble moral. Entonces eso ya no
.
Dijo que en el pasado, instancias privadas tenían más poder que el gobierno en turno, por encima de la soberanía; ahora, añadió, si bien el objetivo no es la confrontación, es importante defender a la nación.
La mención en la mañanera provocó la molestia de los dueños de Legacy Vulcan, porque dijeron que afectaba la posibilidad de un acuerdo, aunque también pensaron que era una expresión de buena fe.
Y sí, añadió López Obrador, “es de buena fe, pero es también para transparentar todo, porque no respetan las leyes, los contratos y ahora demandan por sumas millonarias, se exhibirán las intenciones.
Mil 500 millones de dólares más intereses, ¡imagínense!, cuando están vencidos los permisos y todo. Además, mínimo vamos a dar a conocer toda la historia y no sólo en México, en el mundo, vamos a recurrir a la ONU
.