“Es incorrecto”, señala el presidente Biden
Dos muertos y dos heridos por un tiroteo en el estacionamiento de un negocio en Indianápolis
Domingo 6 de junio de 2021, p. 24
Washington. El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció ayer que dejará de obtener en secreto los registros telefónicos y de correo electrónico de los reporteros durante las investigaciones sobre filtraciones de información, un cambio que abandona una práctica condenada por organizaciones periodísticas y grupos de defensa de la libertad de prensa.
“Si bien la Casa Blanca no se inmiscuye en investigaciones penales, la emisión de citaciones para averiguar datos de periodistas que trabajan en filtraciones no es una práctica coherente con la política presidencial”, indicó la vocera de la Casa Blanca, Jen Psaki.
“El Departamento de Justicia ya ha confirmado en reiteradas ocasiones que no recurrirá a esta práctica en la investigación del caso”, agregó.
El periódico The New York Times indicó el miércoles que en el gobierno de Donald Trump el Departamento de Justicia obtuvo en secreto los registros de llamadas telefónicas de cuatro periodistas del diario, como parte de una investigación para saber quién les filtró información.
El cambio de política anunciado ayer se produce después de que el presidente Joe Biden sostuvo el mes pasado que era “sencillamente incorrecto” intervenir los datos de los periodistas y que el Departamento de Justicia pondría fin a esa práctica durante su gobierno.
La táctica de utilizar citaciones y órdenes judiciales para obtener ciertos archivos de los periodistas ha sido utilizada tanto por gobiernos demócratas como republicanos con el propósito de identificar las fuentes que hayan revelado información confidencial.
Sin embargo, esta práctica fue objeto de escrutinio redoblado en el mes reciente, cuando funcionarios del Departamento de Justicia alertaron a los reporteros de tres organizaciones periodísticas –The Washington Post, CNN y The New York Times– que durante el gobierno de Trump agentes de esa dependencia obtuvieron sus registros de llamadas telefónicas.
El Departamento de Defensa de Estados Unidos “mantendrá la actual política sobre la exhibición de banderas no oficiales” en respuesta a si permitirán la presencia de banderas LGTB en instalaciones militares.
“No haremos una excepción para que se exhiba la bandera del orgullo”, ha explicado un portavoz del Pentágono, John Kirby, en declaraciones a CNN. La medida no implica “en modo alguno” cuestionar el “respeto y admiración que sentimos por todo nuestro personal LGTBQ+ cuando visten de uniforme o de civiles”.
La decisión contrasta con la del Departamento de Estado y su secretario, Antony Blinken, que autorizó en abril el uso de la bandera arcoíris en instalaciones diplomáticas, incluso en la misma asta que la bandera estadunidense.
Dos personas perdieron la vida y otras dos resultaron heridas la madrugada de ayer en un tiroteo en un estacionamiento en el noreste de Indianápolis, capital del estado de Indiana.
Oficiales de policía respondieron a un reporte de disparos justo después de las dos de la mañana y en el lugar encontraron a cuatro personas baleadas, informaron medios locales.
Un hombre fue declarado muerto en el lugar y otro pereció poco después de ser llevado al hospital. Otro hombre y una mujer sufrieron heridas y fueron trasladados a un nosocomio en condición estable, señaló hoy el Departamento de la Policía Metropolitana de Indianápolis.
Al parecer, el tiroteo ocurrió en el estacionamiento después de que las víctimas estuvieron en un negocio local, comentó la policía. Detectives de homicidios investigan los hechos.












