Ante el toque de queda que impera en España por el rebrote de coronavirus, Jonathan Paredes experimenta una sensación de miedo y trata de afrontarlo de la mejor manera posible, sin parar de entrenar, aplicando todas las recomendaciones necesarias en Madrid, donde radica desde hace varios años.

Tras su retorno a la alberca para seguir con los planes hacia 2021, con las Series Mundiales de clavados de altura que modificaron su calendario de competencias debido a la pandemia, Paredes hace una pausa en los entrenamientos para la entrevista con La Jornada mediante la aplicación WhatsApp.

“Acaban de anunciar un toque de queda a las 11 de la noche y debemos estar en casa. Es una situación complicada. Empieza a dar un poco de miedo y honestamente no sabemos hasta cuándo va a ser.

Se escuchan rumores muy fuertes de que este estado de alarma podría ir hasta abril o mayo del siguiente año, comentó el doble medallista mundial en la prueba de 27 metros.

Paredes tenía la ilusión de viajar a México y pasar con la familia las fiestas decembrinas, pero las medidas tomadas por el gobierno español y el Ministerio de Sanidad debido a la segunda ola de contagios echaron abajo sus planes, pues no puede salir con su esposa ni tampoco recibir la visita de sus padres.

Va a ser bastante complicado y tenemos que afrontarlo de la mejor manera posible, ya que no hay más opciones. Lo importante es tratar de evitar contagios y cumplir con las recomendaciones que nos están dando para no seguir propagando el virus y pretender que todo sea normal otra vez, comenta el deportista, luego de que España rebasó el millón de casos y los hospitales están a su máxima capacidad.

Sin competencias en 2020

El Covid-19 dejó al clavadista sin opciones de generar recursos en las competencias Cliff Diving, organizadas por Red Bull, uno de sus dos patrocinadores, pues en el serial se reparten premios económicos a los que suben al podio. El mexicano ha sido ganador de estas pruebas y un referente en recientes años.

Paredes agradece el apoyo de los patrocinadores porque, a pesar de que se cancelaron las competencias este año, no me dieron la espalda. De la beca mensual que recibía del Fondo del Deporte para el Alto Rendimiento (Fodepar) no he recibido ningún pago, está en pausa y no sabemos qué va a pasar. Creo que todos los atletas estamos en la misma situación tras la desaparición del fideicomiso.