Chihuahua, Chih., La juez de control Nora Aída Espino Aguirre, del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Chihuahua, ordenó liberar a Oswaldo M. H., esposo y presunto feminicida de Susana Saláis, porque la Fiscalía Especializada en Atención a Mujeres Víctimas del Delito (FEM) no presentó pruebas suficientes.

Espino Aguirre encontró contradicciones en las pruebas aportadas por la FEM y resolvió que eran insuficientes para determinar la probable responsabilidad del cónyuge; además, la defensa presentó imágenes de cámaras de seguridad de una gasolinera y el reporte de la plataforma de servicio de taxis en que Oswaldo labora de chofer, que comprueban que no estuvo en la escena del crimen.

Susana Saláis fue asesinada el 6 de junio en su domicilio, en la colonia Los Minerales de la ciudad de Chihuahua, y la fiscalía informó que fue un suicidio; sin embargo, rectificó cuando familiares y allegados a la víctima denunciaron que fue torturada y su cadáver presentaba huellas de abuso sexual.

El móvil del crimen fue violencia doméstica y la joven fue estrangulada por su marido en un acto sexual consensuado, dice parte de la indagatoria que la fiscalía estatal filtró a medios de comunicación.

Según la FEM, Oswaldo M. H. manipuló la escena del crimen e incurrió en contradicciones, pues dijo que halló el cadáver atado y arrodillado en el piso, pero el cuerpo estaba sobre la cama cuando llegó la policías.

Wendy Chávez, titular de la Fiscalía Especializada en Atención a Mujeres, anunció que impugnarán la resolución a proceso y seguirán con las pesquisas.