Ataviados con tapabocas, guantes, caretas y overol blanco, trabajadores de la Secretaría de Obras sanitizan lugares públicos con mayor afluencia en la Ciudad de México, como una medida para evitar la propagación del Covid-19.

Ayer por la mañana, con el apoyo de aspersores motorizados e hidrolavadoras de alta presión, limpiaron la Alameda Central, donde rociaron una mezcla de cloro con agua sobre pisos, banquetas, guarniciones, mobiliario urbano, postes y barandales.

La secretaría de Obras y Servicios informó que estas labores se extenderán sobre Paseo de la Reforma, zonas de oficinas de Insurgentes, accesos del Sistema de Transporte Colectivo Metro de la calzada de Tlalpan, así como la Alameda Sur, entre otros puntos.

Al sur de la ciudad, la segunda plaza cívica más visitada de la capital, el centro histórico de Coyoacán, quedó desolado ante el cierre de restaurantes, bares, cantinas y la prohibición al público en general de transitar por los jardines Hidalgo y Centenario, donde se prohibió la entrada.

La alcaldía determinó cerrar todos los parques, entre ellos la Alameda Sur, ante las dificultades que enfrentan algunos capitalinos de mantenerse confinados en sus hogares y deciden salir.

La medida se mantendrá hasta nuevo aviso y se determinó como un refuerzo al llamado para que la gente se quede en casa y no asista a los lugares públicos, luego de realizar varios recorridos y detectar a un gran número de personas que paseaban por estos y otros sitios de la demarcación.

A dos semanas del llamado, la gente ha salido a pasear a sus mascotas, caminar o correr por estos puntos pese a la recomendación de las autoridades de no salir para evitar contagios.