La titular de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), María Candelaria Ochoa Ávalos, minimiza las recomendaciones y participación de las organizaciones de la sociedad civil, afirmó Anayeli Pérez Garrido, directora de Justicia Pro Persona, una de las agrupaciones que solicitan se emita la alerta de género en la Ciudad de México.

Con ella no se puede tener interlocución. Hay un cuestionamiento incluso ofensivo al trabajo de las defensoras de derechos humanos, muy contradictorio con la trayectoria que supuestamente tiene en el tema de participación de las mujeres, mencionó la también asesora jurídica del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF).

Expuso que la petición de renuncia de Ochoa Ávalos, la cual presentaron el martes pasado diversas organizaciones, no sólo es por el procedimiento de alerta de género en la Ciudad de México, el cual está detenido, sino también por el cúmulo de acciones y obstaculización para la participación de las agrupaciones.

Pérez Garrido señaló que en Jalisco la comisionada intentó impedir la presencia de organizaciones en una reunión del mecanismo y en Veracruz, antes de que se solicitara la tercera alerta por desaparición de mujeres, se le pidió que ampliara las medidas por violencia feminicida, a lo cual se negó.

Eso orilló a que las organizaciones pidieran una tercera alerta y lo que hizo Conavim es juntarla con la de feminicidio... las recomendaciones en el tema de desaparición son prácticamente nulas.

En el caso de la segunda alerta en Zacatecas, hace poco la Conavim interpuso un recurso de revisión por el amparo que ganaron las agrupaciones para que sea declarada.

Por su parte, Aimee Vega Montiel, investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades, dijo que es comprensible el reclamo de quienes se han manifestado públicamente por la situación de emergencia nacional debido al incremento de la violencia feminicida, pero pidió dimensionarlo a nivel estructural.

A quien habría que llamar la atención es a la propia Secretaría de Gobernación y desde luego al gobierno federal porque hemos visto en otros escenarios, y el de la Conavim no es el único, el debilitamiento de la política de igualdad y de combate a la violencia contra las mujeres.