La actriz Yalitza Aparicio, protagonista de Roma, fue nombrada ayer embajadora de Buena Voluntad de la Unesco para apoyar a los pueblos indígenas, junto a quienes luchará por igualdad de oportunidades.

Soy una mujer indígena orgullosa que busca el rescate de las lenguas indígenas (...), así como igualdad de oportunidades en todo, dijo Aparicio en la sede de la Unesco en París, al recibir el título de manos de la directora general de la institución, Audrey Azoulay.

El nombramiento de la actriz, que figura entre las 100 personas más influyentes del mundo según la revista Time, está orientado a impulsar iniciativas que reivindiquen los derechos de los pueblos indígenas y fomenten una mayor conciencia social.

Aparicio, de origen mixteco y primera indígena mexicana nominada a un Óscar, aseguró que su trayectoria es un claro ejemplo para que los pueblos autóctonos luchen por no ser discriminados y rechacen quedarse al margen de la sociedad.

Crecí en una etapa en que subliminalmente te decían que no, que era un mundo al que no pertenecías (...), que simplemente estabas determinado a trabajar tal vez como empleada doméstica o en el campo, explicó la también profesora, cuyo talento como actriz descubrió el director Alfonso Cuarón en una audición para Roma.

En la película, Aparicio encarna a Cleo, la empleada doméstica que tuvo Cuarón cuando era niño. Para el papel tuvo que aprender mixteco, la lengua de su padre.

Me apena haber perdido el derecho a aprender mi lengua, dijo, explicando que sus padres creyeron que esa era la mejor manera de protegerla de la discriminación.

Ahora trabajamos para que las comunidades se sientan orgullosas de su identidad y tratando que los padres que conservan su lengua la transmitan, explicó.