La Oficina Federal de Investigación (FBI) de Estados Unidos está dedicando mayores recursos a la investigación del tiroteo en El Paso, Texas, así como de otras posibles amenazas terroristas internas en contra de ciudadanos mexicanos, reportó la embajada del país vecino a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) en respuesta a la nota diplomática que el gobierno de México envió por el ataque del 3 de agosto.

Tras la masacre cometida por el joven de 21 años, Patrick Crusius, entre la comunidad hispana en un Walmart en El Paso, Texas, el gobierno mexicano, por conducto de la cancillería, envió una nota diplomática en el que reiteró su condena y rechazo por los actos perpetrados.

“Los discursos de odio no deben tener lugar en nuestras sociedades. El mismo concepto de ‘supremacía blanca’, es decir, la falsa idea de que existe superioridad entre las razas, resulta contrario a la convivencia pacífica en cualquier lugar del mundo. Estas ideas únicamente generan divisiones nocivas y violencia, además de que son incompatibles con la hermandad de nuestros pueblos”, comunicó la nota diplomática mexicana enviada hace poco más de una semana.

En respuesta, la embajada a cargo de Christopher Landau respondió que compartía la preocupación de México sobre incidente al que calificó de terrible y apreció el interés de la administración mexicana en la investigación en curso.