La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, hizo ver que el desvío de 190 millones de pesos de la Secretaría de Finanzas hacia una empresa fantasma se realizó un mes antes de las elecciones locales y presidenciales del año pasado.

En conferencia de prensa, la mandataria dijo que estas investigaciones, a cargo de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), requieren secrecía para ser resueltas.

Ante los medios, señaló: Digo, este recurso sale en junio de 2018. Ya la interpretación se las dejo a ustedes. Es lo que dice la propia investigación.

Explicó que el desvío millonario fue detectado durante el proceso de entrega-recepción de la Secretaría de Finanzas a finales del año pasado y a raíz de las revisiones a la cuenta pública 2018.

A partir de estas irregularidades es que las autoridades actuales han dado parte a los órganos internos de control de cada área y hasta a la PGJ.

Resaltó que todas las secretarías han reportado diversas irregularidades que requieren desde sanciones administrativas o, en su caso, penales. Incluso, precisó, continúan diversas revisiones a la nómina del gobierno hasta las comisiones sindicales, con el objetivo de transparentarlas.

No a complicidades

El lunes pasado se dio a conocer la detención de dos hombres y una mujer, ex funcionarios de la Secretaría de Finanzas, quienes aprobaron el envío de 190 millones de pesos a una empresa que no estaba registrada dentro de los proveedores del Gobierno de la Ciudad de México.

Sheinbaum no quiso hablar sobre los detalles del caso, ya que una de las detenidas es pareja sentimental de Miguel Ángel Vásquez, ex jefe de Oficina de Miguel Ángel Mancera en la anterior administración capitalina.

Este es un tema que está en manos de los jueces. La jefa de Gobierno no persigue a nadie, no es un objetivo político, no tiene que ver con eso, pero cuando un funcionario recibe el gobierno, si no presenta ante la Contraloría o la Procuraduría las quejas, también se hace cómplice, y aquí no va a haber complicidad, aseveró.