A partir del martes comenzarán a presentarse a consideración del Senado los nombramientos de las embajadas y consulados que, a tres meses de iniciada la presente administración, permanecen sin titular. El internacionalista Eduardo Rosales advierte sobre la necesidad de romper con el vicio y ciclo del amiguismo y compadrazgo presentes en anteriores sexenios al momento de designar a representantes de México en el exterior y que se priorice a los diplomáticos de carrera.

De acuerdo con fuentes de la Cancillería mexicana, se prevé que cerca de 80 por ciento de las nuevas designaciones sean a personal del Servicio Exterior Mexicano (SEM). La semana pasada, el canciller Marcelo Ebrard informó que habrá un predominio del personal de carrera e informó que las designaciones políticas o culturales habrán de ceñirse al decálogo de acciones enfocadas en la atención de las personas mexicanas que radican en el exterior.

En entrevista, Rosales, profesor investigador de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán de la Universidad Nacional Autónoma de México, refirió que en el pasado embajadas relevantes han sido refugio de los amigos a los que se les quiere evitar cuestionamientos políticos en el país, reducto de algunos cercanos a la figura del Presidente de la República.

Destaca que la función de los representantes de México en el exterior es relevante y espera que la administración que recién arranca conciba estas designaciones como un hecho a largo plazo, para con ello evitar conductas como las presentadas en el sexenio pasado en las que embajadas –como la de Estados Unidos–hubo varios cambios o permanecieron largo tiempo sin titular.

Ello rompe la continuidad, los acuerdos, las negociaciones, e interrumpe los procesos que se tienen con todos los países, destacó.

Sin titular, 55 legaciones

Al hacer una revisión de los directorios de las embajadas, consulados, misiones permanentes ante organismos internacionales y oficinas de enlace de México en el mundo, es posible apreciar que 55 persisten sin titular.

Según datos proporcionados por la Secretaría de Relaciones Exteriores –a través de una solicitud de información– al 30 de noviembre de 2018, 36 titulares de embajadas y consulados concluyeron sus labores al presentar su renuncia.

El desistimiento de los cargos fue de nombramientos políticos, previa solicitud hecha por la misma Cancillería, a petición del entonces equipo de transición. A ello se suman las representaciones que no estaban ocupadas, cambios de comisión o aquellos diplomáticos que decidieron jubilarse, como el caso del embajador Rubén Beltrán, quien estaba en Chile.

El personal asignado al exterior tiene derecho al pago del traslado de retorno a México por parte de la SRE. Hacia el final del año pasado, 23 servidores públicos solicitaron la prestación de menaje de casa y/o boletos de avión, por los cuales la Cancillería pagó 3 millones 636 mil 12 pesos, según información ofrecida en la solicitud con folio 00005000011619.

En naciones como Japón, Nueva Zelanda, Singapur, Chile o Perú –naciones integrantes del Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico– México no tiene embajador.