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Peligran tres mil viviendas y dos escuelas por el NAIM en Santa Lucía
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▲ Las unidades habitacionales aledañas a la base aérea de Santa Lucía son habitadas por tres mil familias de militares. En en el plan maestro del NAICM, ese conjunto se debería demoler.Foto Marco Pelaez
 
Periódico La Jornada
Domingo 16 de diciembre de 2018, p. 9

En caso de que se construya el Nuevo Aeropuerto Ciudad de México (NAICM) en las instalaciones de la Base Aérea Número 1, en Santa Lucía, requerirá demoler tres mil viviendas, la Escuela Militar de Materiales de Guerra, reubicar dos escuelas de nivel básico, afectar el casco de una antigua hacienda de 1576 y el Museo Militar de Aviación.

Mandos castrenses, revelaron que de acuerdo con el plan maestro para la construcción de la nueva terminal aérea, será necesario edificar una base para la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) y que podría asentarse en el estado de Querétaro para mantener la operatividad y despliegue de las fuerzas armadas en caso de contingencia o desastre natural.

Para la construcción de pistas, la terminal, y otras estructuras de seguridad aeroportuaria, aduana, estacionamientos y servicios, requerirán la demolición de la Escuela Militar de Materiales de Guerra, instalaciones inauguradas en febrero por el entonces mandatario Enrique Peña Nieto.

En esta escuela se llevan a cabo los cursos de formación de sargento segundo, dedicados al mantenimiento del armamento del Ejército y, durante un año, más de 250 militares estudian.

Además, se imparten cursos especializados en materiales de guerra. En los últimos cinco años el gobierno federal invirtió mil 242 millones de pesos en la modernización de la Base Aérea Militar.

Estas instalaciones que se localizan en el municipio de Tecámac, Estado de México, también se localiza el Museo Militar de Aviación.

Se tendrá que reubicar la Escuela Militar de Tropas Especialistas de la Fuerza Aérea con 400 alumnos. Existen también dos unidades habitacionales en las que habitan las familias de tres mil efectivos del Ejército y la Fuerza Aérea que tendrían que ser reubicadas, y dejarían de funcionar dos escuelas de nivel básico que prestan sus servicios a los hijos de militares y de ciudadanos que habitan en las zonas aledañas a la base.