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La muestra

En territorio amigable

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▲ Fotograma de la cinta de Warwick ThorntonFoto
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na pandilla salvaje. En territorio amigable (Sweet country, 2018), segundo largometraje del australiano Warwick Thornton (Sansón y Dalida, 2009), sitúa su trama de western crepuscular en las áridas llanuras de Alice Springs, Australia, a finales de los años 20 del siglo pasado. El escenario es un clásico pueblo fantasma, sin iglesia ni alcaldía, sin la sombra de poder institucional alguno, donde sólo prevalece la ley del más fuerte. En ese territorio áspero, el racismo del colono perpetuamente alcoholizado y su misoginia vuelta legitimación del derecho de pernada, instauran los usos y costumbres. El aborigen despojado de sus tierras se convierte en esclavo virtual, objeto ideal de todos los abusos, y las mujeres sólo pueden ser prostitutas sumisas, esposas invisibilizadas o tristes reservas de sementales. En ese territorio perdido en el desierto, la revuelta aislada de un aborigen agraviado, Sam Kelly (Hamilton Morris, estupendo), adquiere las dimensiones de un escándalo capital, una mancha para el honor del supremacista blanco, y por lo mismo se castiga con la saña de una persecución violenta. La trama de En territorio amigable, título irónico, se vuelve así la ilustración del delirio racista de una comunidad de forajidos empecinada en aniquilar a un hombre negro.

Aunque de entrada el panorama se antoja demasiado pesimista, hay lugar en la cinta de Thornton para matices que confieren mayor complejidad al relato. Una solitaria voz humanista, la del pastor Fred Smith (Sam Neill) y la imposición de un elemental aparato de justicia a cargo del juez Taylor (Matt Day), permiten vislumbrar una salida en este laberinto de tropelías impunes. El capital de odio que juntos acumulan el ranchero March (Ewan Leslie) y el infatigable perseguidor racista, el sargento Fletcher (Bryan Brown), tienen como contrapunto interesante al también colono Mick Kennedy (Thomas W. Wright), padre de un adolescente mestizo y hombre más mesurado, incapaz de prevenir que su hijo se perfile como un racista más zafio aún y más taimado. Aunque el director australiano propone un relato de época, son claras las resonancias del filme en el clima actual de intolerancias emergentes. Con una realización sobria y un manejo inteligente de las convenciones del género, En territorio amigable es un western atractivo con aristas novedosas en su exploración del racismo ordinario, un tema de actualidad insoslayable. Se exhibe en la sala 2 de la Cineteca Nacional a las 12 y 17 horas.

Twitter: @Carlos.Bonfil1