El problema de la violencia y la inseguridad va más allá de la legalización de la mariguana y de su efectiva despenalización, advirtió el coordinador de los senadores del PRI, Miguel Ángel Osorio Chong.

Explicó que en la pasada sesión del Senado presentó una iniciativa para liberar el consumo de mariguana con fines personales, de recreación, ya que en el PRI están convencidos de que se deben vencer tabúes y estigmas, y hacer a un lado prejuicios para pasar de un enfoque de seguridad a uno de salud.

No obstante, “debemos ser claros en los alcances que la despenalización de la cannabis tendrá en la pacificación del país”, dijo.

Osorio Chong sostuvo que la liberación de esa droga es un paso en la dirección correcta, pero difícilmente ocasionará que se termine con los grandes mercados de drogas sintéticas, como las metanfetaminas o la cocaína.

Tampoco, agregó, se logrará que se ponga fin al secuestro, la extorsión, el homicidio y la impunidad con que actúa en ciertas partes del país la delincuencia organizada.

El legislador advirtió que en caso de que el Congreso apruebe despenalizar el consumo de mariguana para uso recreativo deberá ir de la mano de una acción contundente y efectiva para concienciar a la gente de los efectos del uso y abuso de esta sustancia.

Se debe tomar en cuenta la experiencia de otros países donde liberalizarla originó el aumento del consumo de sustancias más nocivas. Además, es necesario que el sistema de justicia ofrezca alternativas de tratamiento y reinserción.

Su iniciativa de reforma a la Ley General de Salud, el Código Penal Federal y a la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada propone sólo despenalizar el consumo de la mariguana para fines recreativos o lúdicos, mientras la de Morena –presentada el jueves pasado por la senadora Olga Sánchez Cordero– permite también la siembra, producción, distribución y venta de cannabis.

Osorio Chong indicó que tanto la iniciativa de Morena como la de Movimiento Ciudadano y la del PRI deben ser analizadas y discutidas a profundidad, con toda apertura y sin prisas.

Es un debate, dijo, que puede y debe abordarse desde diferentes perspectivas, que van desde los derechos humanos y las libertades hasta la salud pública, la seguridad ciudadana, la economía y la regulación. Se trata de un tema complejo, con muchas aristas, que no acepta simplismos y simplificaciones.

Recordó que el presidente Enrique Peña Nieto presentó la iniciativa para terminar con la criminalización del consumo de mariguana con fines recreativos y para permitir su uso terapéutico y medicinal.

Por ello, el PRI propone cambios a tres leyes a fin de que el consumo de cannabis, su posesión y transporte, en pequeñas dosis, ya no sea delito. La propuesta es de 28 gramos por persona, mientras la iniciativa de Morena lo ubica en 30 gramos.