Sociedad y Justicia
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Aumentan consultas médicas por problemas con tatuajes
 
Periódico La Jornada
Viernes 12 de octubre de 2018, p. 42

Realizarse un tatuaje, o removerlo, implica un riesgo de afectación a la piel, sobre todo por cicatrices y marcas, en ocasiones permanentes, advirtió la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD).

Aunque no hay cifras oficiales, especialistas de esta fundación señalaron que las consultas por problemas relacionados con tatuajes son cada vez más comunes.

Las tintas son la principal causa de reacciones y complicaciones debido a la hipersensibilidad a los componentes de estos productos, sostuvo Javier Ruiz, uno de los especialistas de esta fundación, quien agregó que tintas de baja calidad pueden causar reacciones alérgicas, principalmente las de color, y en especial el rojo, el más difícil de remover.

Pero el riesgo no sólo se presenta al momento de realizarse el tatuaje. Alrededor de 25 por ciento de quienes se los realizan buscan posteriormente removerlo; en muchos de los casos, la razón se debe a sentirse víctimas de discriminación o por cuestiones laborales.

La complicación se presenta cuando el tatuaje es elaborado por alguien con poca experiencia, ya que un tatuador profesional sólo inyecta la tinta en la epidermis, es decir, la capa superficial de la piel; sin embargo, personas sin la técnica adecuada tienden a expandir la tinta por varias capas, lo que hace que su remoción llegue incluso a ser imposible.

Martha Morales Sánchez, otra de las especialistas de la FMD, explicó que el láser es el sistema más adecuado para eliminarlos, al enfocarse en un solo punto de la piel, pero ello requiere hasta 10 sesiones. La cirugía es el método más rápido, pero puede dejar cicatrices permanentes.

Retirar un tatuaje suele ser más costoso que hacerlo, ya que tiene un precio promedio entre 3 mil y 5 mil pesos por sesión, aunque disminuye cuando sólo se trata de tinta negra. Siete de cada 10 personas que buscan removerlo son mujeres.

De acuerdo con el Consejo Nacional para Prevenir la Discrimi-nación, cerca de 12 millones de personas en el país tienen un tatuaje, la mayoría jóvenes.