La tasa de embarazo adolescente entre niñas de 10 a 14 años se mantiene como un foco rojo en nuestro país, debido a que entre 2015 y 2017 no se detectó ninguna disminución en su curva de crecimiento, reconoció Ricardo Bucio Mújica, secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, quien destacó que pese a contar desde 2014 con una Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo Adolescente (Enapea) se carece de un presupuesto para operarla a escala nacional.

Al presentar el Manual para la capacitación de brigadistas, promotoras y promotores juveniles en la prevención del embarazo adolescente, elaborado por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), destacó que la tasa de embarazo en adolescentes de 15 a 18 años logró detenerse, pero no así para el grupo de edad de 10 a 14 años, por lo que desde el año pasado se conformó un grupo especial para atender esta problemática.

Reunidos en la sala Mario Molina de la sede de Naciones Unidas en México, Christian Skoog, representante en nuestro país del Unicef, subrayó los efectos devastadores que puede tener en la vida de una niña o adolescente el embarazo a temprana edad, entre ellos la deserción escolar y la transmisión generacional de la pobreza.

Recordó que de 2009 a 2014 también hubo un incremento en la tasa de fecundidad en adolescentes, al situarse en 77 nacimientos por cada mil adolescentes, mientras que México permanece como la nación, miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos con la tasa más elevada de embarazo adolescente.

En el contexto de la conmemoración del Día Internacional de la Niña, agregó que el Consejo Nacional de Población estimó que en 2016 la tasa de fecundidad en niñas de 12 a 14 años era de 3.5 por cada mil, por lo que reiteró que el embarazo adolescente afecta su desarrollo sicosocial y repercute negativamente en sus oportunidades de vida.

Bucio Mújica destacó que pese a las metas establecidas por la Enapea para 2030 de erradicar los embarazos en niñas de 10 a 14 años, para 2025 se alcanzarían poco más de 23 mil nacimientos en niñas de esa edad, de las cuales más de 60 por ciento vive en unión libre.