Grifton. El sudeste de Estados Unidos permanecía este domingo bajo amenaza de inundaciones a gran escala con potencial para provocar roturas de presas y deslizamientos, después del paso de Florence, que ha dejado al menos 15 muertos y daños por miles de millones de dólares.

Aunque la tormenta pasó a categoría de depresión tropical, avanza lentamente sobre Carolina del Sur y Carolina del Norte, descargando fuertes lluvias sobre las cuencas ya saturadas, lo que según las autoridades podría traer más muerte y destrucción.

Los servicios de rescate permanecían alertas en Grifton, pequeña localidad de Carolina del Norte amenazada por los crecientes niveles de agua en un arroyo cercano y en el río Neuse.

Aún tenemos algunos días por delante, advirtió Brock Long, jefe de la Agencia Federal de Servicios de Emergencia a la cadena CNN; aseguró que en el centro y el oeste de Carolina del Norte y Virginia no se han terminado las duras condiciones climatológicas.

Long llamó a estar alertas ante las advertencias oficiales sobre posibles inundaciones.

Estamos esperando que haya muchos daños, dijo, y agregó que las presas podrían verse amenazadas por el aumento del nivel del agua.

Tras golpear la costa atlántica de Estados Unidos, Florence avanzó con fuertes lluvias que hicieron subir el nivel de los ríos.

La lluvia continuó cayendo este domingo por la mañana en el condado de Pitt, Carolina del Norte. Las inundaciones seguían afectando el área que desde el viernes presenta un cielo oscuro y campos agrícolas anegados.

▲ La ciudad de Trenton, Carolina del Norte, anegada tras el paso de Florence.Foto Ap

Unos 2 mil 800 miembros de la Guardia Nacional de Carolina del Norte colaboran en las tareas de rescate, mientras otros mil permanecen a disponibilidad.

El presidente Donald Trump saludó a los rescatistas y las fuerzas del orden que trabajan muy duro para ayudar a la población.

Según el senador por Carolina del Norte, Thom Tillis, la policía arrestó a varias personas que se negaron a abandonar las zonas de riesgo.

En las localidades golpeadas por la tormenta se reportaron varios casos de saqueos y al menos cinco personas fueron arrestadas por la policía en Wilmington, Carolina del Norte, según el senador.

Tillis advirtió que la recuperación será larga y costosa.

El sector agrícola, la mayor industria de Carolina del Norte, ha sido golpeado duramente por Florence, lamentó. Tendremos que estimar los daños en los cultivos en términos de impacto económico para la reconstrucción; estamos hablando de miles de millones de dólares.

En la costa de Carolina del Sur, la localidad de Myrtle Beach trataba de volver a la normalidad. Victor Shamah, propietario del bar Bowery, decidió abrir porque la gente quiere comer y beber.

Una clienta señaló: Todos están estresados. Es hora de salir y tomar una copa.