Nueva York.

El presidente Donald Trump culpó a los demócratas de la separación de niños inmigrantes de sus familias en la frontera; el procurador general defendió esta política y críticos continuaron denunciando dicha práctica que este martes fue condenada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como una violacion de los derechos humanos de los niños.

“Separar a las familias en la frontera es culpa de la mala legislación aprobada por los demócratas. Las leyes de Seguridad Fronteriza deberían ser cambiadas, pero los dems (demócratas) no pueden ponerse de acuerdo”, declaró Trump en un tuit publicado la mañana este martes.

El procurador general, Jeff Sessions, en una entrevista, afirmó que sí es necesario separar a las familias en la frontera. Lo que está sucediendo es que tenemos cada vez más gente llegando con niños, ingresando por puertos de entrada, ingresando ilegalmente, y no les puedes dar inmunidad. Esa es una violación. Creemos que toda persona que ingresa al país ilegalmente debe ser fiscalizada.

En entrevista con el conservador Hugh Hewitt, agregó: “no puedes darle inmunidad a gente que trae niños de manera imprudente, inapropiada e ilegal… Entonces, esos niños están siendo bien cuidados”. Argumentó que si la gente no desea ser separada de sus hijos, no debería traerlos con ellos

Sin embargo, como han repetido constantemente expertos, no existe ninguna ley estadunidense que oblige a las autoridades a separar a los niños de familias inmigrantes que ingresan al país. Además, abogados y especialistas en asuntos de refugiados han reiterado que solicitar asilo en otro país es un derecho humano internacional, reconocido en las leyes estadunidenses. Más aún, se han reportado casos de familias que llegan por un puerto de ingreso donde se presentan directamente con las autoridades para solicitar asilo y que son separados de sus hijos y son detenidos.

Una amplia gama de agrupaciones de migrantes y de defensa de sus derechos, como religiosos, políticos y artistas, entre otros, continúan con diversas expresiones de repudio y protesta, como demandas legales contra la política anunciada por Sessions –llamada cero tolerancia– e implementada en meses recientes (se sabe que por lo menos unos mil 200 niños han sido separados de sus padres desde octubre de 2017 hasta la fecha).

Algunas figuras públicas han condenado la práctica, algunos con gran ferocidad, como el extraordinario creador y guionista David Simon –autor de The Wire y Treme, dos de las series de televisión más reconocidas a escala mundial– quien ayer tuiteó una vez más sobre el asunto: Estamos manteniendo a niños pequeños en jaulas. Apartados de sus madres. Incomunicados. Lo cual es tortura. Y crueldad. Y sin sentido. Y despiadado. Despierten, chingaos. Estadunidenses. Esto es hoy. Es en tu nombre.

Mientras tanto, más allá de algunos reportajes sobre estas prácticas, hay poca transparencia sobre las condiciones en que son detenidos los menores de edad. Sessions asegura que después de 72 horas bajo custodia de agentes de inmigración del Departamento de Seguridad Interna son trasladados a una agencia dentro del Departamento de Salud y Servicios Humanos, la cual supuestamente busca colocarlos con familiares o conocidos mientras esperan el proceso judicial contra sus padres. Pero abogados y reporteros han informado de casos en los que menores de edad han permanecido varios meses y algunos más de un año en centros de detención en varios puntos del país.

El senador demócrata Jeff Merkley, quien había criticado esta política cruel de Trump, intentó visitar un albergue para menores de edad –un ex almacén de Walmart en Brownsville, Texas– el pasado fin de semana, supervisado por el Departamento de Salud, pero le fue negada la entrada e incluso los administradores llamaron a la policía para escoltarlo a salir del lugar. Merkley videograbó todo esto, preguntó qué sería lo que se está ocultando y reiteró su condena a esta política. La Casa Blanca lo acusó de propagar mentiras y de apoyar políticas que permiten el ingreso de criminales al país.

La Oficina de Derechos Humanos de la Organización de Derechos Humanos en Ginebra llamó a que el gobierno de Trump cese de inmediato la separación de niños de familias que llegan a la frontera solicitando asilo. La vocera de la entidad, Ravina Shamdasani, comentó que Estados Unidos debería cesar de inmediato esta práctica. La acción de separar a familias llega a ser interferencia arbitraria e ilegal en la vida familiar, y es una seria violación de los derechos de los menores de edad. Agregó que el uso de detención migratoria y separación de familias como disuasivo es contrario a las normas y los principios de los derechos humanos, reportó la agencia France-Presse desde Ginebra.

Es de gran preocupación que en Estados Unidos al control migratorio parece que se le ha otorgado prioridad sobre el cuidado efectivo y protección de niños inmigrantes. La detención nunca está en el mejor interés del niño y siempre constituye una violacion de sus derechos.

Shamdasani señaló que aunque Estados Unidos respeta en general los derechos de los menores de edad, lamentó que sea el único país en el mundo que no ha ratificado la Convención de la ONU sobre los derechos del niño.