Sociedad y Justicia
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Femmva demanda al Congreso prohibir esta práctica

La gestación subrogada atenta contra los derechos de mujeres y menores
 
Periódico La Jornada
Miércoles 4 de abril de 2018, p. 41

La gestación subrogada atenta contra los derechos de las mujeres y los menores, pues se utilizan a las primeras como medio y objeto para gestar niños al servicio de intermediarios, aseveró la organización Feministas Mexicanas contra Vientres de Alquiler (Femmva).

En conferencia de prensa, demandó al Congreso de la Unión prohibir este ejercicio. Atenea Acevedo, integrante de la organización, dijo que la experiencia internacional y local demuestra que regular algo que vulnera derechos no ayuda a ningún tipo de transparencia ni hará que esta práctica sea mejor. Al contrario, toda la experiencia nos muestra que no deja de haber clandestinidad, no deja de prestarse a trata y tráfico de personas.

La organización, que tiene seis meses de haberse fundado, expuso que la maternidad subrogada se asocia a la feminización de la pobreza, pues en la mayoría de los casos las mujeres acceden debido a su situación económica.

Se trata de un negocio internacional con ganancias millonarias, dirigido a gente adinerada, que puede pagar a una agencia intermediaria hasta 240 mil euros, en tanto, las mujeres gestantes reciben solamente entre 0.9 por ciento y 10 por ciento del pago total.

Femmva señaló que las empresas que brindan estos servicios ofrecen a las mujeres contratos abusivos y un porcentaje alto no conoce los términos del documento. Algunas son separadas de sus familias y es común inyectar hormonas dos o tres veces al día durante meses y transferirles varios embriones.

La salud de las mujeres se ve afectada pues, debido a los procedimientos, existe mayor probabilidad de preeclampsia y abortos selectivos. Además, expuso la organización, la industria de la gestación subrogada depende también de la venta de óvulos. Tratamientos riesgosos que pueden llegar a comprometer la vida de la mujer y su propia fertilidad.

Señaló que contrario a lo que sucede cuando se adopta un niño, en los vientres de alquiler se les niega a las criaturas la tutela institucional, no hay estudio de las motivaciones.

Ante tal situación, la organización llamó al Estado a que se haga cargo de lo que está consagrado en las leyes, su obligación de proporcionar a la ciudadanía medios de vida dignos, un trabajo digno para las mujeres. Gestar para otros no es un trabajo, es una forma de explotación.

Femmva resaltó que en México no existen cifras que muestren el número de mujeres que acceden a la gestación subrogada y aunque en Tabasco y Sinaloa está regulada, no hay datos sobre la situación en la que se encuentran.