A pesar de los trabajos que llevan a cabo para tener representantes de casilla en todo el país, como parte de la estrategia de defensa del voto, la coalición Juntos Haremos Historia aún reporta en estados del norte una cobertura de 35 a 40 por ciento en promedio.

En este esquema, Ricardo Monreal, representante territorial del equipo de campaña de Andrés Manuel López Obrador en la circunscripción electoral dos, que incluye Tamaulipas, Coahuila y Nuevo León, trabaja un atlas de riesgo para definir zonas de inseguridad y violencia para votantes y autoridades electorales.

Es una zona de alto riesgo porque hay territorios completos donde se ha perdido el control institucional del Estado mexicano, como Tamaulipas, una región de Coahuila, Nuevo León, en la Huasteca de San Luis Potosí; incluso en Zacatecas y Guanajuato, señaló.

Monreal reconoció, por otro lado, que en la zona ha habido déficit enorme de representación de casillas. De 31 mil que se instalan en esta circunscripción, en 12 mil no tuvimos representación (más de 30 por ciento), y hubo lugares donde tuvimos muy escasa o que no fueron (los representantes), a pesar de que estaban acreditados, dijo en referencia a procesos electorales pasados.

Hoy queremos subsanar, superar ese vacío y lograr la cobertura total. En el norte es más complicado, porque hay regiones donde tuvimos apenas 12 por ciento de cobertura de casillas representadas. Ahora tenemos un promedio de 35 a 40 por ciento, afirmó.

Para la izquierda ha sido la circunscripción más difícil –Morena ha obtenido 1.7 por ciento en la elección federal–, pero ahora los partidos del Trabajo y Encuentro Social, integrantes de la coalición, consideran que pueden tener un repunte significativo y lograr la alternancia política. Incluso no descartan ganar una gubernatura en la zona.