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Zhong Zhong y Hua Hua crecen con normalidad en el centro chino de investigaciones

Cerebro de monos clonados dará luz sobre el Alzheimer y el Parkinson

Dado que estos modelos con genes idénticos viven en el mismo ambiente, se podrá ver si esa parte de su organismo se desarrolla de forma similar o diverge, explica líder del estudio

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Zhong Zhong y Hua Hua en brazos de su enfermeraFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Jueves 1º de febrero de 2018, p. 2

Pekín.

A Sun Qiang le gusta la historia del Rey Mono desde que era niño. Envidiaba la magia de duplicación del mono que le permitía crear una copia a partir de unos mechones de cabello.

Ahora, Sun, de 45 años de edad y director del centro de investigación de primates no humanos de la Academia de Ciencias de China, se ha vuelto mago al clonar los primeros macacos idénticos con el mismo método de la oveja Dolly.

No puedo creer que lo lográramos, dadas las dificultades que tuvimos, señaló Sun cinco días después de que su investigación fue publicada en línea por Cell. Fue difícil hacer magia.

Desde que la oveja Dolly fue clonada con células somáticas adultas en 1997, se ha logrado la clonación de otros 22 mamíferos, incluyendo ratones, ganado, cerdos, gatos y perros.

Sin embargo, la clonación de primates no humanos con transferencia nuclear celular somática ha sido un desafío.

En 1999, estadunidenses clonaron macacos rhesus con un método más sencillo de división de embriones. Así, se logran gemelos, pero sólo se pueden generar hasta cuatro crías a la vez, lo que no es útil en la producción de varios clones genéticamente modificados para la investigación médica.

Intentos anteriores

Los intentos anteriores para clonar macacos con la técnica de Dolly generaron embriones viables que no lograron madurar hasta convertirse en bebés sanos.

Científicos del Centro Nacional de Investigación de Primates, en Oregon, estuvieron a punto de lograrlo en 2010. La macaca sustituta abortó de forma natural después de llevar el embrión cinco meses, explicó Sun.

Señaló que su equipo aceptó con gran valor la tarea de clonar primates no humanos.

La experiencia de los científicos estadunidenses mostró que este experimento no es una misión imposible. Pero siempre es más fácil decirlo que hacerlo, afirmó Muming Poo, uno de los autores del estudio y director del Instituto de Neurociencia del Centro de Excelencia en Ciencia Cerebral y Tecnología de Inteligencia Cerebral de Shanghai.

Sabemos que los espermatozoides compiten por llegar al óvulo. Sólo después de que el esperma activa el óvulo se puede desarrollar un embrión. Hacemos esta analogía: el beso de un esperma despierta a la bella durmiente, sostuvo Sun.

De acuerdo con Sun, no se produce la fertilización en la clonación, aunque la activación sigue siendo la clave en la transferencia. La técnica comienza removiendo el núcleo del óvulo que porta el ADN y remplazándolo con otro núcleo de otro cuerpo celular.

Una vez que un embrión es implantado en la matriz de una madre sustituta, no podemos hacer nada más que esperar, precisó el científico.

Sin embargo, el núcleo celular diferenciado de los monos, en contraste con otros mamíferos, como ratones o perros, se había resistido a la transferencia.

El equipo de Sun intentó varios métodos distintos para superar el desafío, pero sólo uno funcionó. Introdujeron moduladores epigenéticos después de la transferencia nuclear que activaban o desactivaban los genes que inhiben el desarrollo embrionario.

Los investigadores descubrieron que la tasa de éxito aumentó al transferir los núcleos tomados de diferentes células fetales, como fibroblastos, en la célula de un tejido conectivo.

No obstante, la tasa de éxito sigue siendo muy baja: de las 60 madres sustitutas sólo resultaron dos macacos saludables. Zhong Zhong y Hua Hua son clones de los mismos fibroblastos fetales de finales de 2017. También se utilizaron células de los donadores adultos, pero tales bebés sólo vivieron unas horas.

Otro reto fue el procedimiento. Como los fibroblastos fetales de los macacos no son transparentes, la enucleación requiere precisión y velocidad. El autor principal, Liu Zhen, un compañero de posgrado, se dedicó tres años a practicar y optimizar la enucleación.

Liu puede retirar un núcleo en menos de 10 segundos y los demás miembros del equipo realizan la inyección en 15 segundos.

El procedimiento de transferencia nuclear celular somática es tan delicado que entre más rápido se haga, menos daño recibe el óvulo, puntualizó Sun.

Sun está orgulloso de su equipo. Cuando empezó el experimento, el grupo rentó una instalación en un suburbio de Suzhou, al oeste de Shanghai, y los 17 miembros tomaron turnos para cocinar y cuidar a más de mil monos por si las madres sustitutas daban a luz antes de tiempo o abortaban.

Al recordar los sacrificios hechos por el equipo, Sun empezó a llorar. No teníamos mucho tiempo para ver a nuestras familias. Por suerte, todos los esfuerzos rindieron fruto, señaló.

Los dos macacos clonados son alimentados con biberón en el centro de investigación de primates no humanos y crecen con normalidad.

Dado que estos modelos con genes idénticos viven en el mismo ambiente, los investigadores podrán ver si sus cerebros se desarrollan de forma similar o divergen. Esto arrojaría luz sobre muchas enfermedades genéticas de los humanos, como el Alzheimer o el Parkinson, explicó Poo.

Aunque muchos expertos aplauden a los primates no humanos como animales idóneos para estudiar funciones fisiológicas únicas de los primates, activistas de China y del resto del mundo han criticado el experimento.