Cultura
Ver día anteriorMartes 5 de diciembre de 2017Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

¿Qué fue de la bailarina que inspiró al artista?

El misterio Degas
Foto
Con motivo del centenario luctuoso de Edgar Degas (1834-1917), el Museo de Orsay le rinde homenaje con la exposición Degas: danza, dibujo, que incluye estos bocetos que el artista francés hizo de Marie van Goethem, joven bailarina de ópera, quien lo inspiró para crear Pequeña bailarina de 14 años, enigmática obra © RMN-Grand Palais Museo de Orsay, http:musee-orsay.fr/Foto © RMN-Grand Palais Museo de Orsay, http:musee-orsay.fr/
 
Periódico La Jornada
Martes 5 de diciembre de 2017, p. 5

París.

En un musical, un ballet, en un cuento... La Pequeña bailarina de 14 años sigue danzando para el mundo más de 130 años después de que Edgar Degas (1834-1917) la exhibió por primera vez. Pero, ¿qué hay de la modelo? Su trágica y misteriosa vida aún intriga.

El artista francés presentó su escultura de cera con tutú en 1881, en París. Lo hizo con un año de retraso y jamás volvió a exponerla. La obra, considerada preámbulo del arte moderno, horrorizó en su época. Ni la niñez del rostro ni la gracia de la posición de ballet lograron atenuar el escándalo.

¿Quién era Marie van Goe-them? ¿Qué sabe el visitante que la admira en la National Gallery de Washington –después de que Francia la dejó partir–, o en museos como el Met de Nueva York, frente a una reproducción de bronce?

Era una de esas jóvenes que su familia enviaba a bailar a la Ópera de París, no sólo porque era un trabajo que permitía llegar a final de mes, sino porque allí podía acercarse a los hombres burgueses conocidos como los protectores, explica Marine Kisiel, comisaria de la exposición Degas: danza, dibujo, montada en el Museo de Orsay de la capital francesa, en el centenario luctuoso del pintor. Era una forma de prostitución.

Los secretos de la Ópera

Nacida en la miseria, de padres inmigrantes belgas, Marie era una niña explotada por su madre y el mundo de la danza, explica la escritora Camille Laurens, autora del libro La pequeña bailarina de 14 años, publicado recientemente en Francia.

Al presentarla en público, Edgar Degas manifestó una verdad hasta entonces callada, la otra cara de la moneda de las magníficas veladas de la alta sociedad en la Ópera de París, los inconfesables secretos de sus bastidores.

Kisiel explica que el artista, un burgués bien integrado entre la flor y nata parisina, no buscaba tomar una posición política. Pero el hecho de que representara esta realidad cruel y fuera contra las falsas apariencias de entonces, era una señal de compromiso.

La historia de Marie es rocambolesca, romanesca... muestra perfectamente cómo era el mundo del ballet en la época, explica Patrice Bart, coreógrafo retirado de la Ópera de París y creador del ballet La pequeña bailarina.

Degas remuneraba a la modelo por posar muchas horas; la dibujó 26 veces –vestida y desnuda– antes de moldear la escultura. Afeando sus rasgos, ensanchando su mandíbula, logró acrecentar la estupefacción del público, acostumbrado a las siluetas bellas y armoniosas.

¿Qué empujó al escultor? Su relación con la joven es también un misterio. Nunca se casó, no se le conocieron amantes y la versión más plausible es que sintiera hacia Marie un paternalismo bondadoso, lejos del cliché del artista que se acuesta con su modelo, explica Laurens en su libro.

Pero tampoco tradujo esa supuesta benevolencia en hechos. Poco después de que la obra se exhibió en la exposición de impresionistas, la bailarina fue despedida de la Ópera de París por sus ausencias repetidas, sin que el artista tratara aparentemente de interceder.

Los destinos de Marie y de la obra se separaron. Tras la muerte de Degas en 1917, la escultura de cera fue reproducida en varios ejemplares en bronce y la original dejó Francia por 160 mil dólares, explica Laurens.

Desde 1956, pertenece al coleccionista estadunidense Paul Mellon y se ha convertido en una especie de ídolo eterno, junto a la que posó Marilyn Monroe o se inspiró Damien Hirst para su colosal escultura The virgin mother.

¿Qué pasó con la joven, desaparecida sin dejar rastro a los 16 años? Dos lectoras de Laurens, expertas en genealogía, habrían aportado un indicio: hallaron la amonestación en París de la boda de una tal Marie van Goethem, de 27 años, con la misma fecha de nacimiento que la bailarina. ¿Era ella? La escritora no pudo confirmarlo. En cualquier caso, la vida de Marie volvería a perderse: la boda nunca se celebró y el esposo, un chocolatero belga, se casó más tarde con otra mujer.