El mediocampista Abraham González aseguró que Pumas comenzará el tornero Clausura 2017 sin presiones, pese a la mala imagen que dejó en el semestre pasado y la salida de hombres fuertes como Darío Verón, Alejandro Palacios y Matías Britos.

No hay presión porque cada domingo es una revancha; si tuvimos un partido malo, al siguiente puedes arreglarlo, expresó.

Señaló que el objetivo es demostrar a la afición que son un equipo diferente, bien trabajado y con el ánimo de volver a ser un club local fuerte.

Añadió que no le preocupa la falta de gol pese a que en la pretemporada sólo lograron marcar un tanto en tres derrotas y el ariete Nicolás Castillo está en duda para jugar.

La responsabilidad no sólo es de los delanteros, en este equipo Francisco Palencia también quiere que los jugadores de banda, los del medio campo lleguemos y aportemos goles, en ese aspecto estamos tranquilos, afirmó.

Vamos a llegar muy bien a pesar de la imagen que se vio en los recientes partidos, pues esta semana la actitud del equipo ha cambiado muchísimo, apuntó.

Los Pumas enfrentarán el domingo su primer reto en este certamen cuando reciban a Pachuca. El volante español dijo que la escuadra hidalguense será un rival complicado pese a que no llega en sus mejores condiciones. Pachuca tiene bajas importantes por jugadores que están en la Copa Oro y Keisuke Honda no sé si podrá jugar. Tuzos es un equipo que arriba es muy dinámico, muy peligroso y juegue quien juegue va a ser muy difícil, aseveró.

Negó que al término del torneo pasado haya pretendido irse del plantel al señalar que sólo hubo un malentendido, ya que le agrada la Liga Mx porque es muy competitiva.

Dejó claro que después de tres torneos de defender los colores del equipo auriazul se sentiría orgulloso der ser un emblema de Pumas; estoy listo para eso, aunque sé que es algo que decidirá la gente.