Iván Bautista es el rey Midas de los clavados y lo ha demostrado por más de una década. No hace distinciones en su trabajo y lo mismo entrena medallistas olímpicos y mundiales que niños y jóvenes ávidos por aprender en los saltos ornamentales en la plataforma y el trampolín.

Guadalajara ha sido la casa que lo cobijó hace 11 años en instalaciones del Consejo Estatal para el Fomento Deportivo, luego de que en la Ciudad de México jamás le reconocieron su labor en las categorías juveniles. A diferencia de colegas que han emigrado al extranjero, prefirió quedarse en el país para hacer escuela formando el semillero de clavadistas de alto rendimiento y entrenadores en sus respectivas categorías.

Bautista celebró ayer con su grupo multidisciplinario un título más en su historial: el undécimo campeonato en la Olimpiada Nacional en Monterrey, con 15 preseas de oro en juvenil menor, en la que Jalisco se encamina a ser por decimoséptima vez la entidad más ganadora del certamen.

Trabajo y confianza forman parte de un sistema aplicado con sus pupilos. Se ve a los medallistas olímpicos y mundiales entrenar con niños y jóvenes en la misma alberca para seguir motivando a las nuevas generaciones, sin olvidar que así empezaron ellos, señala Bautista.

El resultado lo enorgullece y hay que seguir con compromisos como los Mundiales de Natación en Budapest (14 al 30 de julio) en el área de clavados, donde México estará ubicado entre los lugares octavo y primero, estima el entrenador, quien no descarta una sorpresa de subir al podio.