Ixtlán del Río, Nay.

Andrés Manuel López Obrador, dirigente nacional del partido Morena, lamentó los enfrentamientos armados ocurridos la noche del miércoles entre elementos del Ejército Mexicano y bandas de huachicoleros (ladrones de combustible) en una comunidad de Puebla, donde fallecieron 10 personas.

Sin embargo, el ex jefe de Gobierno de la Ciudad de México declaró: “no es nada más la ordeña de los ductos; se roban la gasolina desde la refinerías, de donde salen pipas, y esto tiene que ver con las mismas autoridades. Es un huachicol, pero de cuello blanco. Huachicoleo en los que ordeñan los ductos y huachicoleo en los machuchones de Pemex, en complicidad con otros altos funcionarios públicos”, expresó.

Está muy mal lo sucedido en la entidad poblana, dijo, y consideró que eso es producto del robo de la gasolina, con un valor de 30 mil millones de pesos al año”.

El ex candidato presidencial llamó al presidente Enrique Peña Nieto a no evadir su responsabilidad sobre la seguridad en México; no se trata de echar la culpa a los mandatarios locales; si el gobierno federal hace las cosas, pero no los de los estados, no sirve, que dejen de estarse acusando mutuamente, ese peloteo que tiene.

El político tabasqueño consideró que no sirven ni el gobierno federal, ni los gobiernos estatales ni los gobiernos municipales, hay que cambiar el régimen, y para eso es la lucha de Morena.

Mencionó que el titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, recibe el informe de seguridad y se lo da a Peña Nieto; igual y lo ve cada semana para entregarle las tarjetas de lo que sucedió. Peña no está informado sobre la situación de inseguridad en el país, está rodeado por elementos del Estado Mayor Presidencial.

Recordó que cuando fue jefe de Gobierno, todos los días a las 6 de la mañana tenía una reunión con el gabinete de seguridad, incluidos sábados y domingos. Peña no se levanta temprano para atender el problema de la seguridad, concluyó.