Washington. El lobby petrolero de Estados Unidos presiona a la administración del presidente Donald Trump para que permita la perforación en el este del Golfo de México. Estimulados por la orden ejecutiva de la semana pasada, el Instituto Americano de Petróleo (API, por sus siglas en inglés) aseguró ayer que quiere que los reguladores federales consideren la posibilidad de perforar nuevas áreas para la extracción de crudo en el Golfo de México. La parte oriental de dicha zona está muy cerca de la zonas de producción e infraestructura existentes, y su apertura estimularía la inversión y la actividad económica que podría crear miles de empleos y proporcionar miles de millones de dólares en ingresos del gobierno, declaró a la prensa Erik Milito, uno de los directivos de la API. La ley federal prohíbe la perforación en el Golfo de México a menos de 200 kilómetros de la costa del sureño estado de Florida. La moratoria debe expirar en 2022, el mismo año en que el gobierno federal programa un nuevo plan de perforación. Milito aseguró que espera que el Departamento de Interior anuncie la nueva iniciativa para antes de esa fecha.