Comités vecinales del Centro Histórico denunciaron el regreso del ambulantaje a la zona oriente, a raíz de la venta a entre 5 mil y 7 mil pesos el metro cuadrado por el director de reordenamiento en la vía pública, Javier Arreola.

La temporada decembrina ha provocado una invasión hormiga de espacios recuperados hace 10 años, con la complacencia de la secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, ante quien se denunció a su subalterno.

La falta de permisos para las romerías, señalaron Miguel Alonso y Guadalupe Campa, coordinadores internos de los comités vecinales centro 7 y 3, respectivamente, no ha impedido que se llenen de puestos las calles.

En un recorrido se observó gran número de ambulantes en la calle Corregidora, desde Correo Mayor hasta Anillo de Circunvalacion; Correo Mayor, desde Guatemala a República de Uruguay; Anillo de Circunvalación, de Soledad a República de Guatemala, y San Pablo, de la estación Pino Suárez del Metro a Anillo de Circunvalación.

Asimismo, están en las calles Academia, Moneda, Del Carmen, República de Bolivia, Santísima, Jesús María, Regina y Mesones, mientras en Motolinia, Madero, avenida Juárez, Uruguay, 20 de Noviembre y Eje Central existe un número importante de toreros.

Los representantes vecinales denunciaron que el funcionario de la subsecretaría de Programas Delegacionales, con clave Lobo 1, ha permitido incluso instalar puestos metálicos en San Pablo, Alhóndiga y Corregidora.

Miguel Alonso, de la zona centro 7, comentó que en el perímetro que comprende este comité vecinal, de San Pablo a Corregidora, ya no hay un solo espacio disponible, porque todo está vendido a menos de dos semanas de la Navidad.

Una situación similar se registra en la zona centro 3, en Mixcalco, que comprende de República de Bolivia a Corregidora; sin embargo, las denuncias presentadas ante la autoridad capitalina no han tenido eco, señaló Guadalupe Campa.

La delegación Cuauhtémoc, por otra parte, se comprometió a no otorgar ningún permiso para la colocación de puestos en la calle Manuel Doblado, levantar los instalados con pretexto de la romería y liberar esta calle por cuestiones de protección civil y seguridad.

Comerciantes establecidos señalaron que tras una reunión con el subdirector de vía pública y mercados, Alejandro Ayala, se acordó que el uso de la fuerza pública será únicamente cuando se presente un problema con los ambulantes que se nieguen a levantarse.

Mencionaron que la mesa de diálogo con la secretaria de Gobierno se mantiene en un impasse para dar solución al problema del ambulantaje, la venta de espacios y la extorsión de que somos objeto.

Por otra parte, ambulantes tomaron uno de los pasos de la estación Buenavista, de la línea B del Metro para ofrecer su mercancía, obstaculizando el paso de los usuarios, sin que ningún policía los retire, con el argumento de que sólo nos tocan los torniquetes o sólo podemos sacarlos de los vagones.